12 de octubre de 2012

Oct 12, 2012

El Obispo de Córdoba (España), Mons. Demetrio Fernández, destacó la reciente proclamación de San Juan de Ávila como Doctor de la Iglesia e indicó que con ella el Papa Benedicto XVI ha propuesto al santo sacerdote como modelo para los cristianos en estos tiempos cambiantes.

“El Papa en virtud de su suprema autoridad apostólica ha declarado doctor de la Iglesia a nuestro San Juan de Ávila, para decir a toda la Iglesia de todos los tiempos que San Juan de Ávila es un santo, cuya doctrina merece la pena conocer, estudiar, asimilar y vivir”, afirmó en una carta enviada hoy a ACI Prensa.

Mons. Fernández afirmó que San Juan de Ávila “es un verdadero maestro de vida cristiana en tiempos de cambio. Él es un evangelizador dedicado con toda su vida a que todos conozcan el amor de Cristo. El ha buscado que nuevos sacerdotes, bien formados y santos, aporten la nueva savia del Evangelio a un mundo nuevo”.

El Prelado también destacó la presencia de unos 500 peregrinos que viajaron desde Córdoba a Roma para asistir a la ceremonia presidida por Benedicto XVI, así como la preparación que tuvieron antes de partir en la basílica española de Santa María la Mayor.

“Y después de vísperas, la lectura reposada y meditativa de textos preciosos del nuevo Doctor de la Iglesia. ‘Sepan todos que nuestro Dios es amor’, porque la religión cristiana, la que Cristo nos ha revelado, es la revelación del amor de Dios, que espera una respuesta de amor por nuestra parte”, escribió el Prelado.

Mons. Fernández relató que al día siguiente de la proclamación, los miles de españoles presentes en Roma se reunieron en la basílica de San Pedro “para dar gracias a Dios por este don a su Iglesia, presididos por el cardenal Rouco, presidente de la Conferencia Episcopal Española, que ha sido la promotora de la causa de canonización y doctorado”.

Asimismo, contó que hubo “varios momentos de cercanía física con el Papa”, el cual “aseguró sus oraciones” para que el Seminario de Córdoba se mantenga fiel a San Juan de Ávila.

Además, el seglar “Francisco Almedina, al presentar las ofrendas del pan para la Eucaristía, invitó al Papa a visitar Montilla, donde se guarda el sepulcro y la casa del Maestro, doctor de la Iglesia”.

Mons. Fernández también destacó el regalo al Santo Padre de una preciosa cruz pectoral que contiene una reliquia de San Juan de Ávila. “Córdoba y Montilla le han expresado personalmente al Papa su amor, su adhesión, la plena comunión”, afirmó.

Finalmente, el Obispo expresó su deseo de que estos acontecimientos y el Año Jubilar que se inicia el 12 de octubre en Montilla, sirvan “de estímulo para seguir las huellas de este clericus cordubensis, Juan de Ávila, que nos incita a perderlo todo con tal de ganar a Cristo para nosotros y para los demás. Esa es la nueva evangelización”.