Los católicos de todo el mundo celebraron el 4 de octubre a San Francisco de Asís, el Santo fundador de las tres órdenes franciscanas. Desde Italia, el monje capuchino más anciano del país, asegura que su vida junto al santo, “ha sido una fortuna”.
El Padre Giulio Criminesi tiene 74 años de edad, y participó hace escasos días en Roma en la celebración del Capítulo General de los Hermanos Menores Capuchinos, pertenecientes a los Franciscanos. Entró al seminario menor a los 12 años de edad. En 1957 hizo el noviciado en Camerino, el primer convento de los Capuchinos donde nació la orden, y años más tarde, se ordenó sacerdote en Loreto.
En entrevista con ACI Prensa, el P. Criminesi explicó que su vida ha estado siempre repleta de alegría al imita a San Francisco, “me siento realizado porque yo también quiero ser como él, el camino de mi santidad, es caminar en esta dirección, y por tanto, doy gracias a Dios por esto”.
“Para mí, la vida del monje capuchino es toda importante, porque conforme pasan los años, he aprendido cada vez más, que he encontrado mi camino, realmente lo que el Señor quería de mí”.
“Me abandoné en las manos del Señor, siempre intentando hacer lo que el Señor me llama a realizar, por tanto, no hay un momento más especial que otro, toda mi vida ha sido una fortuna”, asegura.
San Francisco nació en Asís en 1182, a los 24 años renunció a las riquezas y a su familia, y se trasladó a la localidad de Gubbio para servir a los leprosos, se vistió el hábito de ermitaño y en 1208, y mientras oía Misa en la Porciúncula, escuchó el evangelio del envío de los discípulos en misión y descubrió su vocación evangélica y apostólica.
Empezó a predicar la paz, la igualdad entre los hombres, el alejamiento de la riqueza, la dignidad de la pobreza, el amor a todas las criaturas y la venida del Reino de Dios, y así nació la Orden Franciscana.
A la edad de 44 años, el sábado 3 de octubre de 1226, hacia las 19:00 horas, murió. Al día siguiente, domingo 4 de octubre, su cuerpo fue trasladado a Asís y sepultado en la iglesia de San Jorge. El 16 de julio de 1228, el Papa Gregorio IX canonizó a Francisco de Asís y se convirtió en Santo.
“Para mí, ser fraile capuchino significa haber entendido lo que el Señor quería de mí, y responder a esta llamada. Haber entendido que Francisco de Asís, que siguió a Cristo, era mi ideal”, concluyó el P. Criminesi.
En Italia, el programa de las celebraciones es muy intenso. El momento culmen será la celebración de la Santa Misa en la Basílica de San Francisco de Asís, en Asís. A pesar de que la Solemnidad se celebra el 4 de octubre, para los Franciscanos, el momento más importante en la conmemoración de San Francisco son las Vísperas de la tarde del 3 de octubre, porque fue en la transición de estos días, en que el Santo partió a su encuentro con el Señor.