Debemos incidir en leyes que promocionen dignidad humana, dice Presidente de Cáritas Latinoamérica

El Presidente de Cáritas Latinoamérica y Obispo de San Carlos-El Vigía (Venezuela), Mons. José Luis Azuaje, señaló que uno de los objetivos de esta institución, como parte de la Iglesia, es poder incidir en leyes y programas que dignifiquen y ayuden al desarrollo integral del ser humano.

En declaraciones a ACI Prensa, el Prelado explicó que el plan estratégico de esta organización, en el ámbito de las comunicaciones, propone no solo informar y formar, sino también incidir en las decisiones de los estados como parte de la participación ciudadana.

“Cómo nosotros desde el trabajo de la Iglesia, y desde nuestras Cáritas poder incidir especialmente en leyes, normativas, en programas que vayan a dignificar y ayuden al desarrollo humano integral”, señaló.

Mons. Azuaje recordó que dentro de la labor que realizan las Cáritas están la promoción de la paz, la justicia y la reconciliación, “el fortalecimiento de los derechos humanos en toda la región a través de la acción de la Iglesia, especialmente en lo que nos pide la Doctrina Social de la Iglesia”.

En ese sentido, destacó el papel de los voluntarios, cuyo número varía de acuerdo a la realidad de cada Cáritas y que puede llegar a un 70 por ciento de voluntariado. “Hay que recordar que la caridad está propuesta como un elemento fundamental dentro de la vida de la Iglesia, y esto tiene que darse fundamentalmente en los distintos niveles, nivel nacional como también a nivel de las Cáritas parroquial”, señaló a ACI Prensa.

“Es un deseo de todas las Cáritas que exista este voluntariado, pero que sea un voluntariado que tenga una permanencia tanto estructural dentro de las Cáritas, como también en su animación personal como responsabilidad bautismal del servicio a los hermanos”, añadió.

Mons. Azuaje también informó que de cara al Año de la Fe “estamos empezando una reflexión bien interesante (…), que es cómo darle un contenido y sobre todo un aliciente temático a toda la acción caritativa de la Iglesia”.

“Es como un aporte que desde América Latina queremos hacer a la Iglesia Universal, especialmente por tantas maravillosas experiencias que brotan desde las mismas comunidades y que poco a poco han ido haciendo como una incidencia y han permeado también la reflexión y el trabajo de nuestras propias Cáritas”, afirmó.