Tras una investigación oficial, la Universidad de Texas en Austin (Estados Unidos) rechazó las acusaciones de mala conducta científica realizada por un activista homosexual contra el profesor de sociología Mark Regnerus, luego de que publicara un estudio que encontró resultados negativos en la vida de niños cuyos padres habían tenido parejas del mismo sexo.
La autoridad de integridad de investigación de la universidad, Robert Peterson, indicó que “revisó cuidadosamente” toda la información disponible, y discutió el caso con otros miembros del panel de investigación.
“He concluido que el profesor Regnerus no cometió mala conducta científica”, señaló en un memorando dirigido a las autoridades de la universidad, el 24 de agosto.
La investigación de Regnerus recopiló información del Estudio de Nuevas Estructuras Familiares, que examinó los resultados de la vida de 3,000 estadounidenses de entre 18 y 39 años.
Regnerus encontró que los hogares encabezados por padres de cualquier sexo, que están comprometidos en relaciones homosexuales, muestran gran inestabilidad.
El estudio descubrió diferencias “estadísticamente significativas” en 25 de los 40 resultados de vda entre niños que crecieron con padres casados, de sexos opuestos, y aquellos que crecieron con una relación que tenía a una madre involucrada en una relación homosexual.
Los niños de hogares con relaciones homosexuales femeninas mostraron más problemas de salud física y mental, más inestabilidad en las relaciones románticas, y un promedio inferior de ingresos económicos al alcanzar la adultez.
Estas personas también mostraron altos niveles de desempleo, adicción al cigarrillo, necesidad de asistencia pública y vinculación en crímenes.
El activista y bloguero Scott Rose denunció a Regnerus por supuestas violaciones éticas, en una carta remitida al presidente de la Universidad de Texas, Bill Powers. Las autoridades universitarias se reunieron con Rose para dialogar sobre sus acusaciones.
Sin embargo, Robert Peterson señaló que “ninguna de las acusaciones de mala conducta científica realizadas por el señor Rose fue fundamentada ya sea por información física, materiales escritos o información provista durante las entrevistas”.
“Muchas de las acusaciones estuvieron expresamente más allá del alcance de la investigación”, indicó.
Peterson dijo que Rose creyó que la investigación de Regnerus tenía “graves deficiencias” e “infirió que debía haber mala confucta científica”.
“De cualquier forma, no hay evidencia para apoyar esa inferencia”, indicó.
Peterson añadió que cualquier problema con la investigación y el análisis de Regnerus debería ser dejado a los debates académicos y futuras investigaciones.
Por su parte, David Hacker, abogado principal del grupo de libertad religiosa Alliance Defending Freedom, elogió el resultado de la investigación.
“Las universidades de Estados Unidos deben servir siempre para buscar la verdad, mercados de ideas libres”, dijo el 29 de agosto.
“Discrepar con las conclusiones de un estudio no es campo para denuncias de mala conducta científica; por lo tanto no estamos sorprendidos de que esas acusaciones fueran declaradas sin fundamento”.
La investigación involucró un tiempo y esfuerzo significativo. Toda la información de las computadoras de Regnerus, incluyendo su correo electrónico y documentos fueron secuestrados. Las autoridades investigadoras tuvieron acceso a sus solicitudes y correspondencia.
La universidad creó un panel de miembros principales de la facultad para asesorar el proceso de investigación, y la universidad mantuvo un consultor experimentado independiente, para monitorear la investigación.
Las autoridades investigadoreas entrevistaron tanto a Regnerus como a Rose. Las entrevistas fueron grabadas y transcritas por un periodista de la corte, reveló el memorando de Peterson.
El director y vicepresidente de la Universidad, Steven Leslie, dijo que aceptó la conclusión de Peterson, de que no hay evidencia de mala conducta, en un memorando del 28 de agosto.
“Consecuentemente, el caso está cerrado”, dijo Leslie.
El informe inicial sobre los hallazgos de Regnerus generó la reacción del lobby gay. La Campaña de Derechos Humanos y la Alianza de Gays y Lesbianas contra la Difamación criticaron el informe de la investigación.
Un grupo de 18 científicos sociales firmaron una declaración de apoyo a Regnerus en junio. Ellos admitieron que su investigación tiene limitaciones, pero ellos consideraron que muchas de las críticas contra él eran “injustificadas”.
En una entrevista con EWTN News el 12 de junio, Regnerus dijo que comenzó su proyecto “sin idea de lo que la información revelaría”.
En su anuncio de la investigación en junio, Regnerus dijo que su hallazgo “más significativo” es “discutiblemente que los niños parecen más aptos para tener éxito como adultos que cuando pasan sus vidas con su padre y madre casados, y especialmente cuando los padres permanecen casados hasta la actualidad”.