13 de agosto de 2012

Ago 13, 2012

El Arzobispo de México (México), Cardenal Norberto Rivera, recordó a los abogados que todo acto justo nace de Dios y que como Juez Universal valorará “los actos justos que los hombres hemos realizado en nuestra vida”.

“Dios es la Verdad misma y por eso es Justo. Todo acto justo entre los hombres nace de Dios y a Dios hace referencia. Él es el Juez Universal ante al cual compareceremos todos los hombres”, afirmó durante la Misa de Acción de Gracias por la conclusión de la Licenciatura de Derecho realizada en la Facultad de Estudios Superior Aragón.

Ante catedráticos, alumnos y familiares, el Arzobispo señaló que “conocer la ley y conocer la verdad sobre los hechos” para dar una resolución justa son dos obligaciones primordiales del abogado que “es el verdadero servidor de la ley”.

En ese sentido, según señaló el Sistema Informativo de la Arquidiócesis de México, el Purpurado explicó que una ley es verdadera solo cuando es fruto de la razón y por tanto respeta el bien común. “Si nos dejáramos llevar por el positivismo jurídico podríamos estar siendo cómplices de situaciones injustas que niegan la naturaleza misma de la persona humana”, advirtió.

Por ello, exhortó a los abogados a tener “conciencia clara que sus argumentaciones no son nunca unos estudios de gabinete, sino que detrás de cada situación en conflicto existen personas concretas que deben ser tratadas con la dignidad que se merece todo hombre”.

“Solo la verdad, y en consecuencia la justicia, son las que deben orientar toda actuación del abogado y solamente así es como el hombre particular es tratado con la dignidad que merece por su simple condición humana”, afirmó.