Cáritas Internacional pidió a los líderes reunidos en la Cumbre de Naciones Unidas sobre Desarrollo Sustentable Río+20, en Brasil, promover un modelo de desarrollo centrado en la dignidad humana que erradique el hambre, la pobreza extrema y la exclusión.
"Llamamos a un cambio de paradigma, a una nueva civilización de amor por la humanidad, que ponga la dignidad y el bienestar de hombres y mujeres en el centro de toda acción. Todo compromiso que se tome en la cumbre de Río + 20 debe validar esta perspectiva. Llamamos a los líderes del mundo a afrontar este desafío, con valentía y confianza, con el fin de que esta cumbre sea un mensaje de esperanza para la humanidad y sobre todo para los pobres y excluidos", expresó en un comunicado difundido este martes.
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En el texto, Cáritas se refirió a la crisis sin precedentes que actualmente golpea a varias naciones y "que se caracteriza por sus dimensiones sistémicas e internacionales".
"En realidad, es una conjugación de varias crisis: alimentaria, energética, climática, financiera, económica y social, que tienen como consecuencia el aumento de la desigualdad, la exclusión, la violencia, la agudización de los conflictos, la migración forzosa, el empobrecimiento de un número cada vez mayor de personas y el escándalo de 1000 millones de personas que sufren el hambre", señaló.
En ese sentido, indicó que la lucha contra el hambre es una prioridad que deben asumir los líderes mundiales, pues "la alimentación es la base para poder desarrollar nuestras capacidades y talentos". Advirtió que de ser cierto que la sexta parte de la población mundial está subalimentada, entonces se está "desperdiciando importantes recursos humanos, que son esenciales para la salud de nuestro planeta".
Asimismo, Cáritas señaló que el desarrollo de las naciones debe contemplar "el cuidado de la creación", pues "nuestros ambientes de vida, sean rurales o urbanos, se deben caracterizar por una vida digna y sana, con máxima sostenibilidad ecológica".
"Caritas apoya la idea de una economía verde, a condición de que respete principios éticos, de equidad y solidaridad", señaló.
Indicó que una visión de "economía verde" no debe sustituir o dejar fuera "los planteamientos correspondientes al ‘desarrollo humano, integral y sostenible’ que se han construido por décadas".
Recordó que "la Doctrina Social de la Iglesia es definitiva en el llamado a buscar nuevas maneras de distribución y privilegiar a la persona, en toda su integralidad, sobre todo a los sujetos más vulnerables, para que tengan una vida digna, y esto confronta claramente muchos de los principios del modelo centrado en el mercado. El nuevo marco económico no tiene que centralizarse en la maximización de beneficios sino que tiene que favorecer el trabajo digno, dando esperanza sobre todo a esos miles de jóvenes que están sin trabajo".
La confederación católica señaló que "todos somos consumidores de los productos de la creación y, como sujetos responsables, podemos optar por maneras de vivir que favorezcan el desarrollo, cuiden el medio ambiente y reduzca los efectos negativos para los más pobres".
"Caritas Internationalis, una Confederación mundial de 164 organizaciones solidarias católicas, reafirma su enfoque de un desarrollo integral humano solidario, entendido como un enfoque completo que tome en consideración la interdependencia de la familia humana y su bienestar", expresó.
El texto completo está en http://www.caritas.org/includes/pdf/caritasrio20statementES.pdf