El Obispo de Tacna y Moquegua (Perú), Mons. Marco Antonio Cortez, pidió ayer no desvirtuar las fiestas religiosas con el consumo de alcohol y la venta de objetos, pues "con la fe no se hace negocio" porque es "como un robo a Dios".
"Las fiestas de la cruz es algo cristiano y no folclórico, con la fe no se hace negocio, es como un robo a Dios (...). Una costumbre no significa que se emborrachen y dejen la cruz a un costado", expresó el Prelado con ocasión de la Fiesta de la Exaltación de la Santa Cruz celebrada ayer.
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El Prelado también se mostró contra la disposición que declaró la fiesta como un atractivo turístico, pues desvía la atención hacia otros aspectos y deja de lado su sentido religioso y orígenes cristianos.