José María Zavala, autor del libro "Así se vence al demonio", señaló que Satanás "campa a sus anchas" porque el mundo se ha alejado de Dios y reniega de sus raíces cristianas; sin embargo, afirmó que –tal como señalaron los exorcistas-, la devoción a la Virgen y el rezo del Rosario son un arma eficaz contra el demonio.
A continuación la entrevista que José María Zavala dio a ACI Prensa
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ACI Prensa: Se habla de las posesiones como algo "medieval". ¿Es así?
Zavala: El demonio siempre está presente, y hoy de manera especial. En una sociedad alejada de Dios, que ha renegado de sus raíces cristianas, el Maligno campa a sus anchas entusiasmado porque muchos creen que no existe o que es un mero símbolo.
ACI Prensa: Y entonces se cuela por sitios insospechados...
Zavala: A Satanás se le combate con información para no dejarle ni una sola rendija abierta por la que pueda colarse. Me refiero a la güija, la cartomancia, la magia, el botellón, las drogas, el alcohol, Halloween… "¡Cuidado con todo eso!", me advertía, en Roma, el exorcista Gabriele Amorth.
ACI Prensa: ¿Cómo son los exorcistas a los que usted ha entrevistado?
Zavala: Son hombres de Dios que practican la oración y frecuencia de sacramentos, además de profesar una gran devoción a la Santísima Virgen. No olvidemos que el rezo del Santo Rosario es un arma muy eficaz contra el demonio.
ACI Prensa: Como Salvador Hernández, exorcista de la diócesis de Cartagena (España), que aparece con frecuencia en el libro...
Zavala: Digo de él lo mismo que dijo un abogado de París nada más conocer en persona al Santo Cura de Ars: "He visto a Dios en un hombre". El padre Salvador es un sacerdote santo: humilde, sacrificado, entregado a los demás, siempre de buen humor… Un hombre sencillo que te hace la vida más agradable con una naturalidad apabullante y que jamás pierde la paz. Es un sacerdote que sabe ser feliz haciendo felices a los demás.
ACI Prensa: ¿Qué caso le ha impresionado más de los que recoge en su libro?
Zavala: La posesión diabólica de un niño de sólo veinte meses relatada por su propia madre, el calvario sufrido por un empresario de 41 años víctima de Satanás, las vejaciones que soporta aún hoy una joven monja en un convento español… Las víctimas rompen ahora su silencio para ayudar a los demás.
ACI Prensa: ¿Se ha guardado casos que no ha sacado en el libro?
Zavala: He seleccionado los más significativos atendiendo a la casuística: desde posesiones por maleficios o maldiciones, hasta las producidas por practicar la güija o convertirse en víctima de magia vudú. También hay casos de infestaciones diabólicas de casas y animales; o de vejaciones, como palizas propinadas por el diablo. Y cada día recibo testimonios en mi correo electrónico de personas que, tras leer el libro, piden auxilio; seres humanos que sufren y reclaman bendiciones del padre Salvador.
ACI Prensa: ¿No le produce un escalofrío entrevistar a personas que han estado poseídas?
Zavala: Siento mucho amor por esas personas que han vivido tanto tiempo entre tinieblas y que, gracias a la infinita Misericordia del Señor, por fin ven la Luz.
ACI Prensa: ¿Quedan "secuelas"?
Zavala: Existe lo que se denomina circumdatio: una especie de efecto rebote que aprovecha el demonio para atacar de nuevo, haciendo que sus víctimas se descuiden en la oración. Una vez abiertas las puertas del mal, aunque luego entre el bien, el diablo va a estar deseando volver otra vez.
ACI Prensa: ¿Teme al demonio ahora más o menos que antes de escribir el libro?
Zavala: Escribir el libro me ha servido para perder el miedo. Muchos lectores me dicen que también lo han perdido. Al demonio hay que tenerle respeto, pues es un ángel caído y, como tal, una criatura superior al hombre. Pero estando cerca de Dios, con la oración y la frecuencia de sacramentos, somos más poderosos que él.
ACI Prensa: ¿Cuál es el fundamento de esa esperanza?
Zavala: El fundamento de esa Esperanza, con mayúscula, es Nuestro Señor Jesucristo, el primer gran exorcista de la Historia. Él nunca nos deja de su mano y sólo así, insisto, somos más fuertes que el demonio.
ACI Prensa: Para concluir con algo práctico: ¿qué "síntomas" podría descubrir en sí mismo un lector de esta entrevista que harían aconsejable que acudiese a un sacerdote?
Zavala: La "prueba del nueve" es la aversión a lo sagrado. Hay muchas personas que no padecen ninguna enfermedad mental sino que, poseídas por el mismísimo diablo, son incapaces de pisar una iglesia porque sienten un odio tremendo a la presencia de Jesús Sacramentado o a una imagen de la Virgen.