El Arzobispo de Bogotá y Presidente de la Conferencia Episcopal de Colombia, Mons. Rubén Salazar, señaló que "las FARC deben reconocer que están obrando indiscriminadamente en contra de la población".
En declaraciones a la prensa y reiterando el llamado que siempre ha hecho la Iglesia a resolver el conflicto a través del diálogo, el Prelado dijo que los ataques de la guerrilla narcoterrorista de las FARC contra la población indefensa no deben realizarse nunca.
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Mons. Salazar dijo además que la paz no será posible si las FARC "siguen con un lenguaje altisonante".
En un comunicado con fecha 7 de febrero, las FARC intentan justificar el último de sus atentados en el que mataron a seis personas presentándose como los "defensores" del pueblo. Culpan de sus asesinatos a los militares que "usan a la población como escudo" por lo que se ven "obligados" a "penetrar a los poblados a fin de golpearlos".
En declaraciones a los periodistas, el Arzobispo de Bogotá expresó su confianza en la acción del presidente Juan Manuel Santos, a quien recibieron los obispos de la CEC en el marco de su asamblea plenaria que se realiza en estos días.
"Hay que creerle al Presidente Santos y a que las FARC en un momento dado puedan tomar la iniciativa de la paz", dijo el Prelado.
Sobre la última declaración de las FARC, el secretario de la CEC, Mons. Juan Vicente Córdoba, señaló que "con una gota más de sangre que caiga de los colombianos ya no podemos estar de acuerdo".
El Obispo electo de Fontibón pidió que se "bajen las armas, se pongan condiciones y se dejen los pretextos" para poder emprender el camino de la paz ante el conflicto interno colombiano al que calificó como "obsoleto y fuera de lugar".
Finalmente, Mons. Córdoba exhortó a las FARC y al ejército a revisar sus objetivos militares para no afectar a la población civil que no está de acuerdo con la violencia.