La Fundación Susan Komen, la institución más importante del mundo dedicada a la investigación y la lucha contra el cáncer de mama, cedió a la fuerte presión de los abortistas y anunció hoy que seguirá financiando a la transnacional International Planned Parenthood Federation (IPPF), dueña de la cadena de clínicas de abortos más extensa del orbe.
En una declaración con fecha 3 de febrero, la Fundación señala que "nos afligió la presunción de que los cambios hechos en nuestros criterios para la financiación se hicieron por razones políticas o para penalizar específicamente a Planned Parenthood. No fue así".
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El texto señala que "seguiremos financiando las subvenciones que financiamos ahora, incluyendo a Planned Parenthood, y preservaremos su elegibilidad para futuras subvenciones".
Presión abortista
Esta declaración aparece luego que la Fundación anunciara el 31 de enero que dejaba de financiar a Planned Parenthood. En pocas horas la Fundación recibió ese día y los siguientes miles de mensajes en contra, insultos a través de las redes sociales e incluso cientos de amenazas de retiro de donaciones por parte de abortistas.
Su sitio web oficial http://www.komen.org/ colapsó presuntamente por ataques de hackers.
El anuncio del 31 de enero hizo que Austin Ruse, presidente de C-FAM en Estados Unidos, alentara a los pro-vida del mundo a felicitar a la Fundación a su correo electrónico news@komen.org y generó un importante movimiento de donaciones de los pro-vida que ahora podrían ser usadas para financiar a la IPPF.
Sobre la marcha atrás de la Fundación, Ruse señala que los hechos de esta semana, "una especie de campaña de la mafia", han demostrado que Planned Parenthood "no se detendrá ante nada para mantener el apoyo de organizaciones como la Susan G. Komen Foundation".
"Planned Parenthood le ha dicho a la Komen Foundation 'dennos dinero o los destruiremos’", sentenció.
Finalmente Austin Ruse dijo que los pro-vida "deben dejar de dar su apoyo a la Susan G. Komen Foundation" y pidió oraciones por los directivos de la institución.
El anuncio de la Komen Foundation dando marcha atrás se da unas semanas después de que en enero de este año se divulgara un estudio que demuestra que el aborto incrementa en casi 200 por ciento el riesgo de cáncer de mama.
La investigación se sumó a otras cinco realizadas en Estados Unidos y China, que en los últimos 18 meses han demostrado que el aborto es una de las principales causas del cáncer de mama.