El Vicario del Papa para la diócesis de Roma (Italia), Cardenal Agostino Vallini, señaló que la Ciudad Eterna "necesita una sacudida moral" para volver a ser respetuosa de la vida de todos, tras el asesinato ayer de un hombre de 31 años y su bebé.
Así lo indicó el Purpurado en referencia al doble homicidio de un ciudadano chino y su hija de diez meses en el barrio de Tor Pignattara en Roma, quienes fueron interceptados cuando volvían a su casa acompañados de la madre de la niña.
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Al ver a dos hombres con el rostro cubierto, el padre de la menor ha reaccionado y los delincuentes no dudaron en abrir fuego asesinándolo a él y a su hija, dejando además herida a la mujer.
Al respecto, la embajada de China en Italia hizo un llamado para que las autoridades locales capturen pronto a los autores del crimen, mientras que el canciller italiano ha expresado sus condolencias a la comunidad del país asiático.
Tras conocer esta lamentable noticia, el Cardenal Vallini señaló que "Roma necesita una sacudida moral que le permita volver a ser una comunidad acogedora, solidaria, respetuosa de la dignidad de la vida de todo ser humano, que rechaza toda forma de violencia y de intolerancia".
En su declaración divulgada hoy por el diario vaticano L’Osservatore Romano, el Cardenal afirma que "la muerte de un hombre de 31 años y de su hijita de pocos meses, asesinados en la calle, es el enésimo alarmante signo de la degradación moral y espiritual que pervierte cada vez más nuestro tiempo".
El Vicario del Papa cuestionó luego: "cuando se acaba con vidas humana sin ningún escrúpulo, cuando el miedo generado por tales episodios invade los corazones y la desconfianza se difunde, nadie debe estar libre de responder a estas preguntas: ¿es ésta una ciudad digna del hombre? ¿Este es el futuro que queremos dejarle a nuestros hijos?"
Solo con una "sacudida moral", concluyó el Cardenal Vallini, Roma "estará a la altura de su milenaria historia que la ha hecho por los siglos faro de civilización para el mundo entero".