El Arzobispo de La Plata (Argentina), Mons. Héctor Aguer, alentó a los fieles a aprovechar el tiempo de Adviento para cultivar la esperanza cristiana, que es la espera del "dichoso final" de la segunda venida de Cristo.
"La Navidad representa para nosotros el acontecimiento central de la historia humana que es la venida de Cristo. Pero el Tiempo de Adviento no solamente se refiere a ese hecho pasado, que es siempre presente, sino que también nos dirige hacia el acontecimiento futuro que es la segunda venida de Jesús", afirmó el sábado en el programa televisivo Claves para un Mundo Mejor.
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Mons. Aguer recordó que por la fe los cristianos creen en la vida eterna. "Por la esperanza teologal nos situamos especialmente en el nivel, a la altura, de aquel premio definitivo, de la auténtica felicidad que es la vida eterna en la comunión con Dios para siempre", afirmó.
En ese sentido, explicó que la esperanza teologal pone a los hombres en comunión con Dios, pues para un cristiano, "desde esta cima de la esperanza teologal, se esclarecen y adquieren sentido y consistencia todas las legítimas esperanzas humanas".
"Con esta esperanza orientada a la vida eterna nosotros esperamos muchas cosas buenas para nuestra vida temporal. Pero ¿por qué podemos esperarlas así? Precisamente porque las conectamos con aquello que es nuestro último fin".
"Todas las rectas esperanzas humanas tienen que ser medios, instrumentos, para alcanzar aquel último fin, y en ese sentido son asumidas por la esperanza teologal", afirmó.
Por ello, dijo que a pesar de todas las dificultades de la existencia diaria, los católicos deben alegrarse de "aquella esperanza fundamental que da sentido y orientación a nuestra vida".