En una nota editorial la revista católica Espacio Laical pidió que la Conferencia del Partido Comunista de Cuba (PCC) que se realizará el próximo 28 de enero de 2012 deje de lado los "dogmas fracasados" y se centré en los cambios profundos de la economía y en la libertad en los medios de comunicación.
La revista, publicada para los laicos católicos en la Arquidiócesis de La Habana, expresó su preocupación porque el plan de trabajo publicado para la próxima Conferencia Nacional del PCC no responde a las verdaderas necesidades de la población cubana.
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En el artículo se señala que "no podemos darnos el lujo de confundir tal gradualidad con la falta de claridad y de celeridad (…) pues sería penoso que las actuales generaciones de cubanos tuvieran que sufrir el dolor de ver sus aspiraciones truncadas".
Espacio Laical manifiesta que la reforma más importante es dar a los cubanos comunes oportunidades de dirigir sus propias vidas y que dentro de las próximas decisiones del gobierno se tenga en cuenta una "refundación de la ciudadanía".
Más adelante indica que es necesario permitir el funcionamiento de empresas privadas pequeñas, medianas y todo tipo de cooperativas. Además pidió la libertad para profesionales como los médicos y abogados, que ahora sólo pueden ejercer sus profesiones en empleos gubernamentales.
La publicación expresó la necesidad de promover el crecimiento de la sociedad civil al dar libertad a las organizaciones sociales independientes y la apertura de los medios de comunicación "a la diversidad de criterios en el país".
Las reformas, dice la revista, también son necesarias en el PCC, así como en "los mecanismos del Poder Popular, para que cada una de las instituciones del poder público posea la autoridad que le corresponda".
El editorial de Espacio Laical reconoció las reformas realizadas por Raúl Castro, sin embargo señaló que "el pueblo siente que no ocurre algo grande capaz de renovar la vida y desterrar la desesperanza".
El gobierno de Raúl Castro ha puesto en marcha una serie de reformas destinadas a mejorar la economía, recortando el gasto público y permitiendo un aumento de la empresa privada. También ha legalizado la venta de viviendas y ha ampliado la venta legal de vehículos.
Con la mayoría de los dirigentes revolucionarios de Cuba en los 80 años de edad, la Revista calificó la próxima Conferencia como "el último momento para la llamada generación histórica" y la convocó a "proponer cambios sustanciales y convocar a la gente para llevarlos a cabo. No pierdan esta oportunidad".