El Arzobispo de Piura y Tumbes (Perú), Mons. José Antonio Eguren, consideró que llena de esperanza ver los cientos de miles de jóvenes que recorren Madrid (España), durante la Jornada Mundial de la Juventud, y que unidos por la fe quieren testimoniar a Cristo en el lugar donde estén.
“¡Gracias Señor por tantos jóvenes deseosos de vivir y testimoniar sin complejos y de manera coherente su fe cristiana ahí donde viven, estudian o trabajan!”, expresó en un artículo publicado por el diario El Comercio el 17 de agosto.
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El Arzobispo, que asiste a la JMJ como Obispo Catequista, destacó la unidad en la fe de los peregrinos a pesar de las diferentes lenguas, razas y culturas a las que pertenecen cada uno de ellos.
“Muchos madrileños me han dicho estos días: ‘qué hermoso y confortador es ver tanta juventud sana, buena y creyente’. Y es verdad: se les ve rezar, cantar y compartir su fe cristiana con alegría y sencillez. No se ve consumo de alcohol o droga, ni actitudes promiscuas, y mucho menos desórdenes en la calles. Tan sólo una juventud en Cristo y con la Iglesia. Alegre y solidaria”, afirmó.
Mons. Eguren dijo que los cientos de miles de jóvenes han llegado a Madrid con “el anhelo de encontrar a Cristo, vivo en su Iglesia, y en Él la respuesta a sus ansias de felicidad, plenitud y sentido para sus vidas”.
“Los jóvenes saben que la etapa de sus vidas que están viviendo les impone algunas opciones decisivas como la especialización en el estudio, la orientación en el trabajo, el compromiso que deben asumir en la sociedad y en la Iglesia. Pero saben muy bien que entre todas las preguntas que surgen en su interior, las decisivas no se refieren al ‘qué’”.
Señaló que la pregunta de fondo es “a ‘quién’ confiar la propia vida. Y los jóvenes saben, como bien les enseñó tantas veces el Beato Juan Pablo II, patrono de la JMJ, que ‘sólo Jesús de Nazaret (…), puede satisfacer las aspiraciones más profundas del corazón humano”.
“Él es también el camino de la justicia, de la solidaridad, del compromiso por una sociedad y un futuro dignos del hombre”, afirmó.
El Arzobispo señaló que en estos días se está constatando en Madrid “lo que dijo Benedicto XVI al comienzo de su pontificado: ¡la Iglesia está viva y es joven y Ella lleva en sí la esperanza de la humanidad!”
Mons. Eguren afirmó que si los cientos de miles de peregrinos “son lo que tienen que ser, prenderán fuego al mundo entero. No el fuego que destruye sino aquel que da vida y calor: el fuego de la verdad y del amor”.