Diversos representantes de las Cáritas de América Latina y el Caribe destacaron la promoción humana que realiza este organismo de la Iglesia Católica y cuya labor social parte "de oír el grito de la gente" necesitada.
"Es el primer paso, ser cercanos a nuestra gente y estar en los lugares en donde el grito es más fuerte, donde hay mayores necesidades. De ese grito es donde ya viene después todo el proceso de que la Iglesia tiene una labor de caridad, de desarrollo, de presencia activa en el cambio de las comunidades", afirmó Mons. José Grullón, Presidente de Cáritas Dominicana, durante un reciente evento que reunió en Lima (Perú), a las Cáritas de América Latina.
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El Prelado dijo a ACI Prensa que un factor que ayuda a la labor de Cáritas es la presencia de la Iglesia en todo el país, pues "todo está repartido en diócesis, todo está repartido en parroquias y las parroquias están repartidas en comunidades o sectores. Entonces llegamos a todo el mundo".
En esto coincidió el P. Patricio Sarlat Flores, Director Nacional de Cáritas México, al señalar que en las primeras 48 horas de una tragedia, "cuando nadie ha dado una respuesta, Cáritas ya llegó", gracias a que "tiene todo un instrumento para dar una respuesta inmediata. Después vendrá la ayuda internacional, fluirán los recursos y otras ayudas".
Sin embargo, aclaró que la función de Cáritas no es asistencialista, "pero mientras exista la emergencia, mientras exista la necesidad, tenemos el deber solidario de ayudar a esas personas".
Por ello, rechazó que en algunas ocasiones se quiera acusar a la Iglesia de no apoyar a los pobres. Puso como ejemplo la pastoral penitenciaria, los comedores de asistencia, asilos de ancianos, las ayudas a los analfabetos o las casas de acogida.
"Yo hablo de lo que me toca ver, de lo que me toca vivir, que es palpar esta obra maravillosa que es Cáritas, que tanto bien hace y está dirigida precisamente hacia aquellos marginados", afirmó a ACI Prensa.
Pregúntenles a los pobres
Por su parte, el P. Giorgio Peroni Marchina, Secretario Ejecutivo de Pastoral Social Cáritas Ecuador, afirmó que un análisis "mínimamente serio de lo que es la historia de la Iglesia", muestra que las iniciativas a favor de los pobres que aplican los gobiernos "han arrancado desde la Iglesia, desde siempre".
Por ello, invitó a los detractores de la Iglesia a ir donde los más necesitados. "Cuando se van donde los pobres y les preguntan a quién le tienen confianza, se dan cuenta que le tienen confianza a la Iglesia".
Dijo que esta confianza no es solo "porque les enseñan a rezar –que también es importante–, sino (…) porque saben que con la Iglesia pueden contar con una familia. Es una familia que participa de la pobreza que tienen".
Esta misma invitación fue extendida por José Luis Pagliettini, Coordinador General Cáritas Argentina, que indicó que más bien a las Cáritas les preocupa no poder hacer más por los pobres debido a la falta de recursos humanos y materiales.
Sin embargo, dijo a ACI Prensa que a pesar de las carencias "se hace muchísimo, y se llega a lugares donde no llega nadie y se trabaja con personas que nadie trabaja, se trabaja con los excluidos".
"En Chile y en toda América Latina tenemos una tradición de acompañamiento al mundo de los pobres. Tenemos figuras muy señeras en Chile, como el P. Hurtado, de una preocupación por la justicia social, por la promoción de la organización popular, por los derechos de las personas. Yo creo que Cáritas da testimonio de eso y en ese sentido creo que esa apreciación (de que la Iglesia no ve por los pobres) es incorrecta", añadió Lorenzo Figueroa, Director de la Pastoral Social en Chile.