Al recibir este mañana al Presidente de la ex-República Yugoslava de Macedonia, Gjorge Ivanov, y a su séquito, el Papa Benedicto XVI alentó a anunciar el Evangelio, con pasión, como hicieron los Santos Cirilo y Metodio, para hacer plenamente humana a la humanidad.
En su discurso, el Santo Padre subrayó que la memoria litúrgica de estos santos "es para todos nosotros motivo de alegría. Estos santos hermanos enviados a los pueblos eslavos anunciaron el Evangelio entre muchas dificultades, pero siempre alentados por una incansable confianza en el Señor".
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Los santos y co-patrones de Europa, Cirilo y Metodio, dijo el Papa, "fueron animados por la pasión de hacer conocer el Evangelio de Cristo y por tal motivo se prodigaron en hacer conocer la doctrina cristiana, recogiéndola en libros escritos en lengua eslava. Sin duda esto fue un evento decisivo para el crecimiento y el desarrollo de la civilización y la cultura eslava en general".
"El testimonio y la enseñanza de los santos Cirilo y Metodio son todavía actuales para quienes están al servicio del Evangelio, y para quienes están llamados a gobernar la suerte de las naciones".
Benedicto XVI destacó luego que "la vida de estos hombres estuvo totalmente dedicada a la actividad apostólica y la intuición divina de hacer comprensible y accesible el mensaje de la Revelación a las poblaciones fue un motivo de unidad para tradiciones y culturas diferentes".
"En la acogida del plan salvífico de Dios, los pueblos pueden reencontrar los cimientos sobre los que edificar civilizaciones y sociedades caracterizadas por el espíritu de reconciliación y convivencia pacífica. No puede haber unidad real sin respeto por la dignidad de cada persona y de sus derechos inalienables".
El Papa resaltó también que "el Evangelio de Cristo, lo comprendieron bien los santos Cirilo y Metodio, es capaz de iluminar todo ámbito y dimensión de la experiencia humana, para hacerla plenamente humana".
Finalmente el Papa Benedicto XVI dijo que "la Palabra de Dios llama continuamente a la conversión del corazón, para que toda decisión, toda opción sean purificadas de interesas egoístas, y esta es la conversión a Dios que hace posible que nazca una nueva humanidad".