El Sector de Trabajadores de la Acción Católica Argentina (SETRAC) dio a conocer una declaración por el Día del Trabajo que se celebra este 1 de mayo en el que alienta una justa distribución de las riquezas.
En la declaración denuncian que con frecuencia, "en la puja sectorial por el reparto de los ingresos generados por la actividad económica, son los trabajadores los que reciben la porción menor, en especial aquéllos que por trabajar en la informalidad están desprotegidos de los convenios colectivos, y de la previsión social".
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Asimismo alertan que el caso es peor cuando se refiere a los hermanos que el mercado considera "sobrantes y desechables". Por otra parte, prosigue la declaración, "cada vez que se evaden impuestos, o se realizan transacciones ilegales, se generan actos de desigualdad, al igual que cuando existe la persistencia de una situación inflacionaria".
El SETRAC recuerda luego el aporte del ahora beato Papa Juan Pablo II, quien en su encíclica sobre el trabajo Laborem Excersens hace un llamado "a favor de la dignidad del trabajador; de la obligada subordinación de la economía al desarrollo de la persona; y del respeto innegociable por toda persona, imagen de Dios, en cualquier escenario socio-político que se pueda dar".
La declaración indica luego que "nuestro compromiso por la evangelización de los trabajadores implica vivir y compartir con ellos la realidad que viven a diario, llevando el mensaje del Evangelio. Estamos comprometidos en esta causa, para ser fieles a Jesús, y así poder construir, como hermanos, una Patria para todos".
Finalmente expresan su disposición para acoger a "todos aquellos que se organizan para que florezcan miles de proyectos laborales donde se dignifique al trabajador".