El Presidente de la Conferencia Episcopal Italiana (CEI), Cardenal Angelo Bagnasco, pidió a Europa ayudar a Italia a afrontar una migración masiva que llegaría desde Libia ante la posible caída del régimen de Muamar al Gadafi.
El Purpurado dijo este jueves a la prensa que "ante nuestros ojos se está verificando una enorme tragedia" que "llevará a muchas personas a abandonar el propio país para ir a donde se pueda e Italia es uno de los países más cercanos".
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"Buscan libertad, una vida mejor, pan y sobre todo esperanza", agregó.
Un régimen contrario al hombre
El miércoles, el Cardenal Bagnasco comparó la revuelta que ocurre en Libia y otros países de África del Norte con la caída de los regímenes comunistas de Europa del Este en 1989. "Cuando un régimen posee una antropología contraria a la dignidad del hombre, el pueblo estalla", afirmó.
El Arzobispo explicó que "llegados a un cierto punto, además de los problemas económicos y políticos, los pueblos antes o después reaccionan necesariamente a una antropología, o sea una visión del hombre, contraria a sus derechos fundamentales, a su dignidad".
Migración masiva
Mientras la oposición avanza hacia Trípoli, capital de Libia, unas 30 mil personas, mayormente egipcios y tunecinos, huyen hacia las fronteras del país para escapar de los enfrentamientos militares.
El Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur), informó el viernes que hasta el momento no han salido botes con personas buscando asilo en Europa. Sin embargo, pidió a todos los países mantener sus fronteras abiertas para recibir a la gente que huye de la violencia.
Ante esto, el ministro italiano Roberto Maroni, exhortó el jueves a sus socios europeos a ayudar a Italia a afrontar lo que podría ser una crisis humanitaria "catastrófica". Las autoridades italianas temen una oleada de al menos 200 mil a 300 mil inmigrantes del norte de África en caso de que caiga Gadafi.