La defensa legal de Asia Bibi, encabezada por la Fundación Masihi, dijo que confía en demostrar la inocencia de la mujer cristiana condenada a muerte por blasfemia, durante el proceso de apelación que se iniciará próximamente en el Tribunal Superior de Lahore (Pakistán).
Los abogados dijeron a la agencia Fides que los testimonios contra Bibi fueron inventados y que el proceso de apelación será muy diferente del que se realizó en el tribunal de primer grado, donde hubo influencia política y presión de los fundamentalistas islámicos.
Recibe las principales noticias de ACI Prensa por WhatsApp y Telegram
Cada vez es más difícil ver noticias católicas en las redes sociales. Suscríbete a nuestros canales gratuitos hoy:
La defensa indicó que el proceso podría durar un año y que lo mejor para la cristiana es permanecer en "la cárcel de Sheikhupura, donde ahora está protegida en una celda de aislamiento".
Jamás hablé contra Mahoma
La agencia Fides tuvo acceso a la declaración que Bibi dio a la justicia pakistaní en el proceso de primer grado y en la que afirmó que jamás pronunció "ninguna palabra contra el profeta Mahoma y en contra del Corán".
Bibi explicó que "solía trabajar en los campos de Muhammad Idree con un grupo de mujeres, recibiendo un salario diario. El día del episodio que me ha sido impugnado, yo estaba trabajando en el campo con otras mujeres. Dos de ellas, Mafia Bibi y Asma Bibi, se alteraron conmigo por el agua que les había llevado: se negaron a beberla diciendo que soy cristiana y nunca aceptarían el agua de una cristiana".
"A partir de ahí surgió una discusión y nos lanzamos palabras fuertes entre mí y las dos mujeres. Las dos fueron más tarde con Qari Salaam (el imán de la localidad), porque conocen a su esposa. Conspirando con él, construyeron una falsa acusación completamente artificial en mi contra", añadió.
Relató que delante de la policía juró sobre la Biblia "que jamás había pronunciado ninguna palabra contra el profeta Mahoma y en contra del Corán, por los que siento un gran respeto. Pero la policía fue cómplice y registró el caso sobre la base de acusaciones falsas contra mí".
Según Bibi, "las dos mujeres me querían involucrar para vengarse por la discusión". Añadió que en más de 40 años nadie la ha acusado de blasfemia. "No tengo formación, no hay ninguna iglesia en el pueblo, no conozco el pensamiento islámico: ¿cómo podría hacer declaraciones inapropiadas contra el Profeta y contra el Corán?", preguntó.
Sobre su empleador, advirtió que "no es una persona imparcial, porque tiene estrechos vínculos familiares con las mujeres mencionadas" y autoras de la acusación.