El jubilado obispo anglicano de Richborough (Reino Unido), Edwin Barnes, se sumó el 20 de enero al grupo de exmiembros de esta denominación cristiana que en los últimos meses ingresaron a la Iglesia Católica. El diario español La Razón informó que el 5 de marzo será ordenado sacerdote.
Barnes ingresó a la plena comunión con la Iglesia Católica junto con su esposa Jane el 20 de enero, durante la Misa y ceremonia de Confirmación que celebró su amigo y también exanglicano, P. Peter Ryan.
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Sin embargo, el diario La Razón dijo que el ejemplo más claro de esta migración global de anglicanos a la Iglesia Católica es el caso del japonés Satoru Kato, que de estudiante de budismo pasó a una iglesia evangélica. Unos jesuitas le introdujeron a la liturgia, pero luego de casarse ingresó al anglicanismo, donde fue ordenado.
Posteriormente el debate sobre el clero femenino anglicano lo llevó a ingresar a la Iglesia Católica y pronto será ordenado sacerdote en Japón y ayudará en parroquias y en una asociación benéfica. "En los temas de ordenación y sacramentos, estoy con Roma; rezo para poder vivir y morir en la Iglesia Católica", afirmó.
El diario español recordó que estos no son los únicos casos de anglicanos que dejan esta denominación cristiana. Indicó que en 2007, de cuatro obispos que abandonaron la Iglesia Episcopaliana, uno, Jeffrey Steenson, obispo de Río Grande (Estados Unidos), es ahora sacerdote católico. Los otros tres ingresaron a grupos anglicanos conservadores liderados por obispos africanos.
El caso de Steenson inspiró a Steven A. Sellers, rector de la catedral episcopaliana de Fargo, en Dakota del Norte (Estados Unidos). Después de "un año de oración y discernimiento", decidió junto con su esposa mudarse a Texas e ingresar a la Iglesia Católica. Probablemente también sea ordenado sacerdote.