Los obispos de Polonia y el ex presidente de este país, Lech Walesa, expresaron su profunda alegría por el anuncio hoy de la beatificación de su compatriota Juan Pablo II el próximo 1 de mayo en Roma, ceremonia que será presidida por el Papa Benedicto XVI.
El portavoz de la Conferencia Episcopal de Polonia, Josef Kloch, señaló a la agencia italiana SIR que los obispos reciben esta noticia "con alegría y esperanza".
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"La alegría brota del hecho de que Juan Pablo II proclamado beato se convertirá en un ejemplo a seguir por todos, por como supo ser hombre y cristiano. La esperanza nace de la conciencia que sus enseñanzas serán recordadas de nuevo".
De eso modo, "cuando recordemos su magisterio, a través de sus escritos Juan Pablo II se encontrará junto a nosotros. Y tal vez así lograremos unirnos en torno a lo que es importante para nuestra Iglesia y nuestro país".
Por su parte, el líder histórico del sindicato polaco Solidaridad, ex presidente de la república y premio Nobel de la paz, Lech Walesa, declaró a AFP "me siento doblemente feliz. En primer lugar, porque un hombre que en vida era un santo se convertirá oficialmente en santo. En segundo lugar, porque tendremos por fin un santo de nuestra época, alguien que conocimos bien".
"Es posible que nuestro gran amigo, una vez convertido en santo, nos ayude con su mirada desde lo alto a resolver nuestros problemas en Polonia, Europa y el mundo", añadió Walesa, que siempre lleva en la solapa una pequeña imagen de la Virgen.
"Nuestro Papa hizo cosas grandiosas. Sin él no hubiera habido Solidaridad en Polonia. El Papa polaco y Solidaridad contribuyeron de alguna manera a hacer desaparecer en el siglo XX al comunismo en Europa", afirmó.
Como parte de las celebraciones por este anuncio, los católicos del pueblo natal de Juan Pablo II, Wadowice, se reunirán a las 09:00 p.m. este viernes en la Catedral de Cristo Rey desde donde realizarán la procesión de la luz hasta la estatua del Papa peregrino.