En su visita de ayer al Policlínico Gemelli, el Papa Benedicto XVI dijo que en cada niño se puede ver el rostro de Dios que siempre está junto a quienes sufren alguna enfermedad.
El Santo Padre afirmó ante los menores que "Dios se ha hecho como ustedes niño para decirles que está siempre a su lado y para decir a cada uno de nosotros que todo niño porta su rostro".
Recibe las principales noticias de ACI Prensa por WhatsApp y Telegram
Cada vez es más difícil ver noticias católicas en las redes sociales. Suscríbete a nuestros canales gratuitos hoy:
"Los quiero y estoy cercano a ustedes con mi oración y afecto, también para daros fuerza en afrontar la enfermedad".
El Papa dijo luego que su visita recuerda a los Reyes Magos que adoraron al Niño Jesús. "Hoy he traído algunos regalos para que sientan, a través de un pequeño signo la simpatía, la cercanía y el afecto del Papa. Pero quisiera que todos, adultos y niños, en este tiempo de Navidad, recordásemos que el regalo más grande lo ha hecho Dios a cada uno de nosotros".
Para acoger este regalo, continuó, es necesario mirar a la gruta de Belén en donde está "ese Niño que es Dios mismo que ha querido venir a la tierra para mostrarnos cuanto nos quiere, y Dios se ha hecho como ustedes niño para decirles que siempre está a su lado y para decirnos a cada uno de nosotros que cada niño porta Su rostro".
Antes del discurso papal, una joven de 19 años que sufre de espina bífida agradeció la visita y dijo que "hoy se enciende la luz de la estrella: una esperanza nueva. Por esto te agradecemos, Santo Padre. Como los Magos, también nosotros queremos llevar nuestros dones a Jesús. Tu visita nos ha llenado de alegría (…) gracias Papa Benedicto".
La coordinadora del centro para la cura de espina bífida del Policlínico Gemelli, Claudia Rendelli, cuenta que "el Santo Padre tuvo palabras de consuelo para todos los niños y con algunos ha conversado. Preguntó a cada uno la enfermedad que lo aqueja, por qué está en el hospital y cómo se encontraba. También ha saludado a los padres. Ha sido un encuentro muy emocionante".
"El Papa es un ‘hermano’, una persona muy dulce con los niños. Ha traído regalos, cajas musicales para los más pequeños, peluches para los más grandecitos y libros para los más grandes. A todos ha obsequiado un paquete con dulces por la Epifanía. Una niña se le colgó del cuello y lo besó repetidas veces diciéndole: ‘gracias porque es la muñeca que quería para Navidad".
Radio Vaticana indica que el Papa también se detuvo ante las incubadoras de los neonatos en terapia intensiva. El director del departamento de pediatría, Dr. Costantino Romagnoli, relató que Benedicto XVI "se ha conmovido mirando las incubadoras de los prematuros porque los ha visto infinitamente débiles".
Antes de concluir su visita, Benedicto XVI alentó "las diversas iniciativas de bien y voluntariado, como la de las instituciones que se esfuerzan en su servicio a la vida. Pienso en particular, en esta circunstancia, en el Instituto Científico Pablo VI, que promueve la procreación responsable. ¡Gracias a todos! ¡El Papa los quiere!"