La violencia contra fieles cristianos se ha cobrado este lunes la vida de otras tres personas en Mosul, en el norte de Irak, en dos sucesos distintos, según ha informado la Policía de Mosul.
En el primero de los sucesos, un pistolero acabó con la vida de dos cristianos hermanos, a los que disparó cuando irrumpió en su lugar de trabajo, situado en la zona industrial de la ciudad. Los dos fallecidos eran soldadores y propietarios del local.
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El tercer cristiano fallecido este lunes fue una mujer de edad avanzada que apareció estrangulada en su domicilio, ubicado en el centro de Mosul. Los ataques contra miembros de la comunidad cristiana en Irak comenzaron el 31 de octubre pasado y se han extendido a la zona norte del país árabe.
El último de los ataques contra fieles que profesan esta creencia se produjo la pasada semana en la zona oriental de Mosul, donde una bomba lapa acabó con la vida de un hombre y de su hija de seis años, según la Policía local.