El P. Scott Binet, médico camilo y coordinador internacional de la Camillian Task Force, exhortó a la comunidad internacional a no olvidar al pueblo haitiano, que tras el terremoto de enero pasado, enfrenta ahora la epidemia del cólera.
En declaraciones a la agencia Fides, el sacerdote llamó a "no olvidar Haití y su pueblo, a tener compasión por estas pobres personas afectadas por el terremoto y por esta terrible epidemia de cólera, sin olvidar el pasado de sufrimiento del que provienen y que los ha llevado a una situación de extrema pobreza y subdesarrollo".
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"Como sacerdote y médico reconozco que el hombre está compuesto de cuerpo y alma, y que curar uno a expensas de la otra es un flaco servicio a nuestros hermanos y hermanas. El pueblo haitiano merece nuestra ayuda y nuestra compasión como ningún otro, sobre todo dadas sus difíciles circunstancias", indicó.
El P. Binet dijo que es difícil dar datos precisos sobre esta situación, teniendo en cuenta que el sismo de enero privó a la población de infraestructuras sanitarias y sociales. Sin embargo, informó que la tasa de mortalidad por el cólera "está disminuyendo gracias a una mayor conciencia acerca de la enfermedad" y a que "los agentes sanitarios están proporcionando atención médica y prevención".
Sobre la realidad después del terremoto, el sacerdote dijo que existen alrededor de mil 300 campos que acogen a un millón 500 mil desplazados, ubicados mayormente en las cercanías de Puerto Príncipe.
"Rezad, ayudadles, sostenerles económicamente o de cualquier otra manera a través de organizaciones de solidaridad. Sed solidarios con ellos de todas las formas posibles", pidió el P. Binet.