La Comisión Permanente de la Conferencia Episcopal Española (CEE), llamó a los españoles a prepararse ante la visita que el Papa Benedicto XVI hará a Barcelona y Santiago de Compostela, para que todo el país se beneficie con este nuevo impulso del catolicismo.
"Nos unimos a nuestros hermanos de Santiago y de Barcelona para hacer extensivo el llamamiento a los fieles de toda la Iglesia que peregrina en España", expresaron los obispos en una exhortación pastoral.
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Indicaron que si bien Santiago y Barcelona experimentarán "de manera más viva y directa" la visita del Papa, "todas las diócesis de España están llamadas a beneficiarse también del impulso de catolicidad que significará la visita del Santo Padre (…). Todos podrán unirse espiritualmente por medio de la oración, ya desde ahora, a las intenciones del Santo Padre".
El texto recordó que en esta ocasión, Benedicto XVI visitará el 6 de noviembre "Santiago de Compostela, donde se guarda el sepulcro y la memoria del apóstol Santiago, el primero que derramó su sangre por amor a Cristo, después de haber evangelizado nuestras tierras de España".
"Desde aquí la fe cristiana se extendería luego por América, en una de las mayores empresas evangelizadoras de la historia de la Iglesia. Antes, Santiago había actuado como polo de atracción para innumerables peregrinos, a cuyo paso se había ido forjando la unidad espiritual de Europa, de la que Benedicto XVI ha hablado de nuevo en su reciente viaje al Reino Unido. A Santiago, pues, el Papa llega como peregrino a uno de los lugares apostólicos más emblemáticos de las raíces cristianas de España, de Europa y de América", afirmaron los obispos.
Seguidamente, recordaron que el otro objetivo de la visita es consagrar en Barcelona el templo expiatorio de la Sagrada Familia. Este evento se realizará el 7 de noviembre.
"El bellísimo espacio, concebido e iniciado por el genial arquitecto y siervo de Dios Antonio Gaudí (1852-1926), se halla ya en condiciones para acoger la celebración del culto divino. Allí se dan la mano la auténtica inspiración artística y la verdadera devoción religiosa", afirmó la Comisión Permanente de la CEE.
Asimismo, explicaron que cuando en el siglo XIX se proyectaba el templo, "la Iglesia advertía ya que la familia natural y cristiana, basada en el matrimonio, constituye una célula básica de la sociedad, a la que el Estado y la Iglesia han de prestar una atención prioritaria, poniéndose a su servicio, sin preterirla ni suplantarla".
Por todo ello, los obispos reiteraron su invitación "a escuchar con atención el mensaje del Papa y a acompañarle con el cariño, con la oración y, si puede ser, con la participación en las celebraciones que presidirá y en los recorridos que hará en Santiago y Barcelona".