El Presidente de El Salvador, Mauricio Funes, desautorizó oficialmente a la feminista Julia Evelyn Martínez quien firmó el llamado "Consenso de Brasilia", un documento no vinculante que promueve la despenalización del aborto en América Latina.
El "Consenso de Brasilia" salió a la luz en julio de este año luego de la conclusión de la 11° Conferencia Regional sobre la Mujer de América Latina y el Caribe, promovida por la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), que depende de la ONU.
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Martínez, directora del Instituto Salvadoreño para el Desarrollo de la Mujer (ISDEMU) había sido respaldada el lunes 23 de agosto en esta decisión anti-vida por la Primera Dama, Vanda Pignato, quien le advirtió que se "preparara para las críticas".
Ante esas declaraciones, el Presidente Funes aclaró el martes 24 que la Constitución de la República "es clara en el artículo relacionado a la penalización del aborto y mientras éste exista, se respetará su contenido".
A través del sitio web de la Presidencia de la República, Funes señala que Julia Evelyn Martínez "no estaba autorizada para firmar en nombre del país el ‘Consenso de Brasilia’, un documento que compromete a El Salvador a revisar las leyes que penalizan el aborto".
El Presidente indica que Martínez "suscribió una declaración que no compromete nada al gobierno; hubo un error de procedimiento por parte de la directora ejecutiva del ISDEMU, ella tenía que haber solicitado a Cancillería, para que ésta a su vez solicitara a la Presidencia de la República, que como funcionaria del gobierno pudiera comprometer al gobierno de la República en las declaraciones que se pudieran haber firmado en el contexto de esa reunión de la CEPAL".
Asimismo dijo que "no hubo una solicitud por parte de la directora ejecutiva del ISDEMU, para que se le depositaran plenos poderes para poder firmar el documento en cuestión, y es por ello que se enviará una notificación a la CEPAL para desautorizar su firma en la polémica resolución".
Para Funes, El Salvador debió haber mantenido la reserva del caso ante este polémico documento, cosa que sí han hecho países como Chile y Costa Rica "porque nuestra Constitución es clara y mientras ese artículo esté vigente o no sea reformado por la Asamblea Legislativa, hay que respetarlo".
"Yo no he dado ninguna orden para que se proceda a revisar la legislación en materia de abortos", precisó.
Consenso de Brasilia no es vinculante
Al respecto, el Director del Population Research Institute (PRI) para América Latina, Carlos Polo, señaló que "durante años nos han vendido la idea que cualquier documento consensuado (en cualquier estamento vinculado a ONU) obliga a los países miembros. Sin embargo, por estas acciones se ha evidenciado que los estados son soberanos en su legislación interna y que el ‘Consenso de Brasilia’ no los obliga ya que no es un documento vinculante".
El llamado Consenso de Brasilia, prosiguió, "al favorecer la práctica del aborto, carece de valor legal pues contradice sus Constituciones y sobre todo el Pacto de San José que efectivamente obliga a nuestros países a defender el derecho a la vida desde la concepción".
"Ya son varios los países que a través de reservas (Chile, Costa Rica, Perú y Nicaragua) y otros a través de declaraciones de altos funcionarios del Poder Ejecutivo como Chile y ahora El Salvador a través de su propio Presidente, están abiertamente cuestionando el valor legal de este acuerdo", concluyó.