El ginecólogo Esteban Rodríguez Martín criticó al Ministerio de Igualdad porque con su ideologizada ley del aborto ha convertido a los médicos en verdugos de los no nacidos, pervirtiendo sus compromisos deontológicos con la sociedad.
La Asociación Nacional para la Defensa del Derecho de Objeción de Conciencia (ANDOC), publicó un artículo en el que el galeno argumenta que su objeción a la ley del aborto se debe a la instrumentalización de los médicos, convertidos en cooperadores de la muerte de seres inocentes, a pesar que el fin de la ciencia médica es salvar vidas y no eliminarlas.
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La ley del aborto, indicó, introdujo "lo que podríamos considerar un nuevo delito; se trata del delito de ‘lesa maternidad’, penado con la muerte", y que es imputado al feto por considerarse que su nacimiento puede "dañar la calidad de vida o los intereses de la progenitora (…) o por venir con alguna anomalía".
Rodríguez Martín añadió que "la indicación de esos abortos nunca es médica sino política, ideológica o social y sin embargo se pretende que sea un médico quien cause la muerte mediante una ‘interrupción’ del embarazo en lugar de un funcionario del ministerio de igualdad o de justicia adiestrados al efecto".
El galeno denunció que esto significa la corrupción de la profesión médica. Dijo que si el Gobierno quiere ejecutar su nueva ley, debería "crear un cuerpo de técnicos abortistas, al margen de la profesión médica y sanitaria", que satisfagan la demanda de ese sector de la sociedad que "desea tener el poder legal -mal llamado derecho- para decidir matar a los hijos antes de nacer".
Rodríguez afirmó que se ha creado "una nueva categoría de técnicos que distingue al verdadero profesional médico que cumple con su vocación" de proteger la vida, de aquellos que no la respetan.
Finalmente advirtió que cuando un médico practica un aborto por dinero, "queda transformado en un mercenario de la antimedicina al servicio del capitalismo mercantil del abortismo industrial representado por la patronal abortista ACAI" (Asociación de Clínicas Acreditadas para la Interrupción del Embarazo).