El Arzobispo de Piura (Perú), Mons. José Antonio Eguren Anselmi, en la Misa por el Día de Nuestra Señora del Carmen, señaló a los fieles que "el calendario litúrgico del Perú y también su geografía" son marianos, por lo que "somos un país que le pertenece a Jesús. Porque María es toda de Jesús".
"Ciertamente –afirmó el Prelado– cuando uno mira el calendario litúrgico del Perú y también su geografía podemos decir que nuestro calendario es mariano y que nuestra geografía es mariana. Por lo tanto, somos un país que le pertenece a Jesús. Porque María es toda de Jesús, Ella le pertenece por completo a Jesús. Lo que le da sentido a María es que es la Madre de Jesús, y la gran cooperadora en la obra reconciliadora de su Hijo".
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"Esta fiesta de la Virgen del Carmen no solamente nos hace recurrir a Ella para cogernos de su poderosa intercesión. Ella nos ama porque somos sus hijos. No somos indiferentes para Ella, sino todo lo contrario, Ella nos quiere y nos conoce con nuestro nombre y apellido", añadió.
Por ello, Mons. Eguren señaló que "la devoción a la Virgen no sólo debe quedar en este apelar a su poder de intercesión, sino que supone también quererla con los afectos puros y nobles del corazón de Jesús y descubrirnos también sus hijos".
"Así como Ella dio a luz a Jesús en Belén, así quiere darlo a luz en tu vida. Ella lo que quiere es ayudarte a llevar a Cristo en todo, pensar, sentir, actuar como Él lo haría si estuviera en tu lugar", agregó.
En el mismo día en que se conmemora a uno de los cinco santos peruanos, San Francisco Solano, el Prelado recordó su figura alegre y penitente y señaló que "de la misma manera, la Virgen del Carmen nos dice hagan penitencia y hagan oración por los propios pecados. Y la penitencia es saber darle la contra a las tentaciones, huir de ellas cuando se nos presenten, es combatir nuestros pecados, nuestros malos hábitos, siempre apoyados en la gracia de Dios. La penitencia es saber ofrecer las contrariedades de la vida".
"La Virgen del Carmen nos pide que seamos santos. Lo que quiere es que nosotros, sus hijos en la fe, nos parezcamos en todo lo posible a su Hijo Jesús. Quien es devoto de la Virgen la honra rechazando el pecado, esforzándose por ser en todo fiel a Jesús", concluyó.