El Obispo de Escuintla, Mons. Víctor Hugo Palma, llamó a la solidaridad con los damnificados por la tormenta tropical Agatha y la erupción volcánica en San Vicente, pues "estamos llamados a ofrecer lo poco o mucho" que se tiene para ayudar a los que han perdido todos sus bienes.
"Llamo a la operatividad de las Pastorales Sociales Parroquiales y agradezco desde ahora la función de la Caritas Diocesana a la vez que la ayuda del Santo Padre Benedicto XVI en su emotivo mensaje de cercanía a la catástrofe de Guatemala (…), así como a Caritas Arquidiocesana en su auxilio fraterno especialmente a los afectados por el erupción de San Vicente Pacaya", expresó en un mensaje.
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El Prelado llamó a volver los ojos a Dios y dijo que a los males sociales se han añadido los causados por la naturaleza.
Los males sociales, comunitarios y familiares –recordó-, son "causados por la maldad humana fruto del pecado". "Ellos también nos hacen derramar lágrimas y vivir en aflicción al punto de constatar que junto a la urgente necesidad de reconstruir sobre el daño de los desastres naturales sigue pendiente la tarea de lograr un ambiente de respeto a la vida y dignidad de la persona humana, desde su concepción hasta su muerte natural", afirmó.
Sin embargo, invitó a recurrir a la Palabra de Dios, que "actúa como una lámpara que ilumina nuestros difíciles pasos en medio de padecimiento de nuestros hermanos; ella enciende la Fe que en los momentos duros se convierte en esperanza y en fortaleza".