El Director General de la Legión de Cristo, P. Álvaro Corcuera, señaló que "no tenía ni la menor idea y que estaba totalmente al margen del conocimiento" de la doble vida del fundador de la congregación, P. Marcial Maciel, y que éste "naturalmente ya no puede considerarse como un ejemplo, un modelo".
En entrevista concedida a El Sol de México en vísperas de la reunión que los visitadores apostólicos sostendrán en el Vaticano con el Secretario de Estado, Cardenal Tarcisio Bertone, el P. Corcuera señaló que "todo lo que venga de la Santa Sede será por nosotros acogido con total obediencia".
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Al contestar la pregunta sobre la incredulidad de algunos sobre su desconocimiento de la doble vida de Marcial Maciel, el P. Corcuera comentó que "es muy comprensible que exista esta sospecha, pero yo puedo asegurar que no tenía ni la menor idea y que estaba totalmente al margen del conocimiento de estos hechos. Comprendo que exista esta duda, este interrogante y a nosotros nos corresponde tomar una posición de mucha responsabilidad".
Para los legionarios de Cristo, dijo luego, toda esta situación, "ha sido una prueba bastante particular, muy dolorosa. Sin embargo, no pienso en lo que hemos sufrido nosotros, sino en lo que han sufrido los demás. Ahora a nosotros nos toca ver hacia adelante, no cerrar los ojos ante estos hechos".
"Pienso mucho también en mis hermanos legionarios en tantas personas que han sufrido profundamente esta confusión... personalmente, a veces pienso que no tengo derecho a pensar como estoy yo, sino como están los demás y como poder aliviar las penas de quienes han sufrido y siguen sufriendo.... También es un momento en el que tenemos que fortalecer la confianza, que no es una virtud en la que simplemente vas a ver que pasa, sino una virtud que te hace aceptar con realismo los hechos con dolor, con pena, pero caminando hacia adelante, mejorando y reviviendo en cada uno de nosotros".
Tras comentar que siguiendo el ejemplo del Papa, también se ha encontrado con varias víctimas de los abusos del P. Maciel, el Director General indicó que la crisis actual constituye "una oportunidad que tenemos también para purificar, para lograr una actitud humilde".
"Nos ha dolido mucho –continuó– lo que han sufrido todas las víctimas, todas las personas. Sinceramente sentimos una pena muy profunda; quisiéramos demostrarles toda nuestra cercanía, todo el apoyo, y también por parte de la Congregación, nosotros hemos pasado un momento que nos obliga a adoptar una actitud, a efectuar un autoanálisis, que nos lleve a realizar realmente lo que Dios quiere, lo que la sociedad espera de la Congregación, para caminar hacia adelante, para no centrarnos en nosotros mismos, sino simplemente siguiendo el ejemplo de Cristo para realizar el bien, que es la misión que tenemos".
Finalmente, el P. Álvaro Corcuera expresó su profundo cariño a México y señaló que un mensaje para sus compatriotas es "que nosotros tenemos que tener muy bien metido en nuestro corazón que debemos reconocer estos hechos, aceptarlos con dolor, buscar formas de reparar todo aquello que va contra nuestros valores humanos y cristianos que hemos recibido y valorar también todo lo bueno que existe y todas las cosas extraordinarias que hemos recibido como mexicanos".