En la habitual conferencia de prensa que se realiza en el avión papal en cada viaje, el Papa Benedicto XVI explicó ayer sábado las razones de su visita a Malta: el 1950º aniversario del naufragio de San Pablo en esta isla, la confirmación en la fe a una Iglesia que vive la fe cristiana intensamente y el apoyo a la gran aporte del pueblo maltés a los inmigrantes africanos, principalmente.
En un breve discurso a los periodistas, el Santo Padre respondió a las preguntas planteadas, explicando sobre el primer punto el mensaje de San Pablo es "importante también hoy. Pienso que puedo sintetizar lo esencial de su viaje con las palabras con las que él mismo ha reafirmado al final de la carta a los Gálatas: fe que obra en la caridad".
Recibe las principales noticias de ACI Prensa por WhatsApp y Telegram
Cada vez es más difícil ver noticias católicas en las redes sociales. Suscríbete a nuestros canales gratuitos hoy:
Tras comentar que gracias al naufragio del Apóstol de Gentes, Malta tiene el tesoro de la fe, el Papa se refirió al segundo motivo de su viaje: "me da gusto vivir en medio de una Iglesia vivaz como la de Malta, que es fecunda en vocaciones también hoy, llena de fe, en medio de nuestro tiempo, y que responde a los desafíos de nuestro tiempo".
"Sé que Malta ama a Cristo y ama a su Iglesia que es su Cuerpo y sabe que, aunque este Cuerpo esté herido por nuestros pecados, el Señor sin embargo ama a esta Iglesia, y su Evangelio es la verdadera fuerza que purifica y cura".
En cuanto al tercer motivo, Benedicto XVI indicó que "Malta es el punto donde los nuevos grupos de prófugos llegan de África y tocan a la puerta de Europa. Este es un gran problema de nuestro tiempo y, naturalmente, no puede ser resuelto por la isla de Malta. Todos debemos responder a este desafío, trabajar para que todos puedan, en su tierra, vivir una vida digna y de otra parte hacer lo posible para que estos prófugos encuentren aquí donde llegan, un espacio y una vida digna".
"Una respuesta a un gran desafío de nuestro tiempo: Malta nos recuerda estos problemas y nos recuerda también que la fe es la fuerza que da la caridad, y da los medios para responder bien a estos desafíos. Gracias", concluyó el Santo Padre.