Diversos obispos de Medio Oriente han expresado su solidaridad al Papa Benedicto XVI ante la campaña mediática orquestada por diversos medios de comunicación que buscan presentarlo como un "encubridor" de abusos sexuales cometidos por algunos miembros del clero. Los prelados resaltan además la gran labor del Santo Padre ante estos dolorosos hechos.
En entrevista concedida a la agencia italiana SIR, el Arzobispo de Mosul, Mons. Emil Nona, señaló que en Irak "nuestros fieles están convencidos de que todo esto se trata de una propaganda contra la Iglesia, para empantanarla a los ojos del mundo. Ciertamente hay dolor por lo que ha sucedido. Por nuestra parte estamos explicando lo que el Papa ha declarado contra este escándalo y las medidas adoptadas para dar luces sobre los diversos casos en los que se está trabajando con firmeza, transparencia y severidad".
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"Los graves errores cometidos por pocos no pueden poner en discusión todo lo que la Iglesia da siempre para favorecer a los niños, jóvenes y todas las personas que son más vulnerables", añadió.
Por su parte el Obispo caldeo de Beirut, Mons. Michel Kassarji, indicó que "un escándalo que golpea a la Iglesia no puede ser usado para desacreditarla. Hay mucha superficialidad en quien crea opiniones también superficiales. La Iglesia, con el Papa a la cabeza, afrontan con firmeza este escándalo y esto es bueno que se sepa".
"La confianza en la Iglesia –agregó– no puede ser minada por hechos de este tipo que no involucran a todos. Nunca como ahora es necesario entonces el testimonio de la intensa oración".
De otro lado, el Obispo de Alep de los caldeos (Siria), Mons. Antoine Audo, comentó que "estamos asistiendo a una grave forma de propaganda anticatólica que debe afrontarse y que genera dificultades. Nos conforta la firmeza de Benedicto XVI al tratar este tema. De nuestra parte estamos haciendo lo posible para informar correctamente a nuestros fieles incluso cuando es difícil ya que no tenemos medios de comunicación social".
A su turno, el Vicario Patriarcal de Jerusalén de los Latinos, Mons. Salim Sayegh, señaló que la Iglesia Católica "es la única que tiene el coraje de mirar en su interior para reparar los errores y esto es muy evidente. Estamos cerca a Benedicto XVI en este momento en que él y la Iglesia son atacados y nutrimos una profunda confianza en todas las iniciativas adoptadas para evitar que cosas similares puedan repetirse".
"Aquí en Jordania –concluyó– nuestros fieles están cercanos al Pontífice y empeñados en testimoniar toda su fe. Creemos que esta es la mejor respuesta a quienes, incluidos grupos fundamentalistas, quieren sin éxito instrumentalizar estos hechos".