Según el informe de daños en recintos religiosos entregado por la Oficina de Estadísticas de la Conferencia Episcopal de Chile, los daños alcanza al 47 por ciento de las iglesias del país, lo que corresponde al 80 por ciento de los templos de las nueve regiones afectadas por el terremoto. Para su reconstrucción, indican, se necesitan unos 260 millones de dólares.
Fueron 12 las diócesis afectadas, entre San Felipe y Temuco, de las 27 que conforman la Iglesia en Chile. De la estadística preliminar se ha contabilizado 545 recintos religiosos dañados, de los cuales 440 corresponden a templos.
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Los daños reportados son de diversas características: un 19 por ciento corresponde a daños severos asociados a derrumbe y demolición total; un 24 por ciento a daños graves pero que eventualmente permitirían recuperar el templo; un 25 por ciento a daños considerables pero recuperables; y un 32 por ciento a daños reparables
Estos números implican que alrededor de un millón de fieles no pueden congregarse comunitariamente en su forma habitual. Por esta razón los párrocos y agentes evangelizadores han debido realizar n especial esfuerzo para garantizar la continuidad de los servicios litúrgicos y el acompañamiento espiritual, pastoral y solidario.
Por la magnitud y gravedad de los daños en los recintos religiosos, el Comité Permanente de la Conferencia Episcopal de Chile ha constituido una Comisión de Apoyo a la Reconstrucción, la cual tiene como finalidad colaborar con los obispos en lo referente a la reconstrucción en sus respectivas diócesis.
Reportes preliminares sostienen que la reconstrucción de los templos costaría más de 140 mil millones de pesos, unos 260 millones de dólares.