El Obispo de Cádiz y Ceuta, Antonio Ceballos, criticó la ley que liberalizó el aborto en el país y recordó que la responsabilidad de proteger la vida de los no nacidos "está en las manos de todos, y no únicamente de los padres".
En una carta pastoral por la Jornada por la Vida, el Prelado señaló que la vida está amenazada de diferentes maneras: desde la violencia doméstica, el hambre que padece un tercio de la humanidad, los accidentes de tráfico, los accidentes laborales "y, sobre todo, el drama del aborto, con la aprobación de la nueva ley".
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En ese sentido, recordó que la recién aprobada ley, que entrará en vigor el 4 de julio, significa "una liberalización total del aborto, considerado como un derecho de la mujer, olvidando los derechos del hijo que lleva en sus entrañas".
"Hay que afirmar, una vez más, que el aborto es siempre un ‘crimen abominable’ como lo calificó ya el Concilio Vaticano II", señaló.
Por ello, llamó a los sacerdotes para que en las Eucaristías del día 25, día de la jornada, "hablen del don sagrado de la vida y que organicen actos especiales de oración con esta intención. También ruego a los catequistas, profesores de religión y responsables de grupos y movimientos apostólicos que sigan implicados en esta Jornada".