El Arzobispo de Santo Domingo (República Dominicana), Cardenal Nicolás de Jesús López Rodríguez, expresó su desacuerdo con el reporte de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) que acusa al país caribeño de "practicar el racismo y el mal tratamiento frente a la población haitiana" tras el terremoto que sacudió al país vecino el pasado 12 de enero.
Según señala la agencia vaticana Fides, el 17 de marzo la ONU publicó un reporte en el que afirmó que República Dominicana "debería adoptar amplias estrategias para combatir el racismo, así como medidas específicas sobre las condiciones y la protección de las personas de origen haitiano".
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A ello el Cardenal López Rodríguez contestó que la ONU "en vez de criticar a la República Dominicana debería destacar mejor la solidaridad y la velocidad con la que el gobierno dominicano se ha movilizado para ayudar al pueblo de Haití cuando padeció el terremoto".
Por su parte, explica la nota, el ex Secretario de la Conferencia Episcopal Dominicana, Mons. Benito Ángeles, afirmó que "todos saben que las autoridades dominicanas se han dirigido inmediatamente a ayudar a los haitianos, y que los hospitales de frontera, además de los de la capital, estaban llenos de haitianos que recibían los primeros auxilios".
Los dominicanos han ayudado desde el comienzo a Haití con dinero, donaciones en dinero, agua y alimentos. Por ejemplo, en la llamada "telemaratón" realizada en Santo Domingo a menos de una semana de ocurrida la tragedia del 12 de enero, reunieron 1,3 millones de dólares.