A pesar de reconocer que se trata de un mal moral, el controvertido sacerdote suspendido Marco Arana justificó la práctica del aborto "terapéutico" como moralmente legítimo.
Durante una conferencia de prensa en la capital peruana donde explicó detalles de su futura candidatura política, el suspendido sacerdote también expresó su apoyo al "protocolo del aborto terapéutico", una serie de normas impulsadas por grupos feministas y abortistas en el Perú para intentar despenalizar, en la práctica, el aborto en el país. "Éste no ha sido reglamentado en nuestro país por presiones de los sectores más conservadores de la Iglesia", agregó.
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Ignorando la doctrina católica que defiende el derecho la vida desde la concepción hasta la muerte natural, el controvertido presbítero dijo que "señalar eso no es estar a favor del aborto sino de la vida, en este caso de la de la madre".
Para Arana, "éste es un tema de salud pública y en ello no debe involucrarse ninguna confesión religiosa".
De otro lado, el presbítero se mostró conforme con la suspensión de sus facultades sacerdotales, comunicada el pasado mes de enero por su Obispo, Mons. Carmelo Martínez; pero señaló que éste "no fue más que un adelanto a un permiso" que él pensaba en abril, fecha en que su movimiento definirá si es o no candidato a la presidencia de Perú.
En la conferencia de prensa, Arana indicó que con la suspensión "en ningún momento estoy faltando a alguien o algo" ya que considera que en necesidades públicas urgentes un sacerdote debe involucrarse en política partidaria.
"Es obvio que al interior de la Iglesia hay percepciones muy distintas a las mías sobre la participación de los religiosos y religiosas en la vida política del país", dijo Arana.
Rechazando las normas vigentes en la Iglesia, que prohíben a un sacerdote participar en política partidaria, Arana señaló que "no puedo estar indiferente ante las necesidades de la población peruana. Si entré en política partidaria fue para servir y garantizar la justicia social y la defensa de los derechos humanos. Además como ciudadano peruano tengo derecho a elegir y ser elegido".
El P. Arana cobró notoriedad por su participación en una ONG ecologista opuesta a las actividades mineras en el departamento peruano de Cajamarca. Paulatinamente, el activismo ecologista del sacerdote fue derivando en participación política, hasta llegar a la reciente creación de un movimiento político de izquierda llamado "Tierra y Libertad".