Miles de peruanos en Arequipa y Lambayeque, en el sur y norte del Perú, respectivamente, marcharon hace unos días en defensa de la vida y contra el aborto, expresando su rechazo a las iniciativas legislativas que pretenden despenalizar este crimen en el país.
Los arequipeños se dirigieron al Club del Colegio de Abogados de Arequipa en la "Marcha por la Defensa de los No Nacidos", para expresar un rotundo rechazo al aborto frente al local donde se realizaba el evento abortista: "I Congreso Latinoamericano Jurídico de Derechos Reproductivos", encuentro que no logró reunir "ni atrajo a los juristas locales, los cuales, en forma mínima se hicieron presentes", explican los pro-vida.
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"Quedó demostrado una vez más que Arequipa le dice Sí a la vida y No a la muerte, porque fue evidente que la mayoría de las personas en nuestra ciudad estaban a favor de la vida", agregaron.
Lambayeque
Por su parte, la marcha en Lambayeque promovida por la diócesis de Chiclayo y titulada "Marcha por la Vida", reunió más de 8 mil manifestantes entre escolares, universitarios y miembros de parroquias y movimientos, quienes se dirigieron "desde el Paseo Las Musas hasta llegar al Atrio de la Iglesia Santa María Catedral, dando arengas al derecho a la vida" y exigiendo que el Congreso "desestime el proyecto que despenaliza el aborto en el país".
El Vicario de la Diócesis de Chiclayo, P. Ricardo Guerrero Orrego, señaló a los manifestantes que "si los parlamentarios fueran cristianos de verdad tendrían que defender la vida", y denunció que muchos de ellos "tienen conclusiones muy superficiales sobre el aborto como que hay que matar al niño para defender a la madre cuando lo que se tiene que hacer es defender a los dos (progenitora y niño)".