Durante una cordial reunión sostenida el miércoles 12 de agosto con la Presidenta de la República Michele Bachelet, los Obispos del Comité Permanente de la Conferencia Episcopal de Chile (CECh) propusieron un "indulto jubilar" para aquellos condenados por la justicia, con ocasión del Bicentenario de la Independencia de Chile, el 2010.
Durante el encuentro, que el comunicado de la CECh describió como "amable y fecundo", se dialogó sobre "diversos temas que preocupan a la sociedad chilena, al Gobierno y a la Iglesia".
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"Entre otros varios asuntos tratados, hemos hecho presente a la Señora Presidenta algunas expectativas frente a la próxima celebración del Bicentenario de la Independencia. Le hemos manifestado el interés de la Iglesia porque esta importante fecha sea una ocasión propicia para que podamos reflexionar con altura de miras, como sociedad chilena en su conjunto, sobre los grandes valores que marcan nuestra convivencia", dice el comunicado.
La CECh revela además que los obispos entregaron a la Presidenta los fundamentos que la Conferencia Episcopal de Chile ha considerado para solicitar un indulto jubilar en el Bicentenario para quienes están condenados por los tribunales de justicia".
Sobre estos fundamentos, los Obispos se han comprometido a presentar próximamente "una propuesta concreta cuando se dé un momento más propicio para el diálogo ciudadano sereno que requiere una iniciativa como ésta".
"Agradecemos la buena disposición que, gracias a Dios, ha encontrado en vastos sectores esta actitud de misericordia, que brota de nuestro mandato evangélico siguiendo una de las más antiguas tradiciones bíblicas y de nuestra historia patria".
El indulto jubilar podría involucrar la liberación de actores de ambos lados de la llamada "guerra sucia".