El Presidente de la Conferencia Episcopal Chilena (CECH), Mons. Alejandro Goic, propuso ante la comisión de salud del Senado la búsqueda de un Consenso Básico Ético que preserve el alma de Chile de cara al próximo Bicentenario.
Mons. Goic recordó su anterior presentación ante la comisión de salud de la Cámara de Diputados, con motivo del debate sobre la distribución o no de la píldora del día siguiente. El Presidente del Episcopado reconoció que si bien en otros temas es posible lograr acuerdos, en aspectos como el del fármaco es difícil hallar consensos.
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"Nos duele la forma como se ha llevado este debate que toca temas tan trascendentales y que va mucho más allá de un sí o de un no a una píldora. Debate hecho de modo reductivo respecto de un tema que involucra la vida humana, la familia, la educación de las nuevas generaciones, etc. Debate hecho también al calor de una campaña política con todo lo que ello significa", expresó.
En ese sentido, recordó que a mediados de los 80’s fue posible lograr un Acuerdo Nacional que llevó a Chile de la dictadura militar a la democracia. "¿No habrá llegado la hora, de que hoy, en un nuevo contexto, consolidada la democracia y de cara al Bicentenario y al futuro de Chile se geste un nuevo Acuerdo Nacional que preserve y perfeccione el alma de Chile?", preguntó.
Mons. Goic explicó que el Consenso Básico Ético tendría por objetivo comprometer a todos los actores sociales en la construcción de una sociedad más equitativa, con "salarios suficientes y mayor justicia social, en beneficio de la dignidad de la persona humana".
También estaría enfocado en la mejora de la educación, de las viviendas, y en la búsqueda de "una salud digna y accesible a todos los chilenos, más allá de su condición económica".
El Presidente de la CECH afirmó que dicho consenso es posible en muchos temas. Sin embargo, lamentó que en sexualidad, aborto, eutanasia, unión de parejas homosexuales, etc., "afloran grandes divergencias, muchas de ellas marcadas por miradas ideológicas o por prejuicios".
"¿Cómo resolveremos estos desacuerdos fundamentales en Chile? Es una gran pregunta. Su respuesta exige sabiduría, discernimiento, fortaleza. En lo que respecta a nosotros cristianos–católicos trataremos de ser fieles al alma de Chile", afirmó.
Añadió que "si lográramos el ‘Consenso Básico Ético’ y actuáramos en consecuencia procurando resolver aquellos primeros temas que mencioné, los segundos, los más controversiales, si bien probablemente no desaparecerán, sí podrían disminuir o ser enfrentados desde una mejor base de acuerdo social, desde unos caminos hacia la fraternidad mejor pavimentados".
Píldora del día después
Con respecto a la píldora del día después, el Presidente del Episcopado advirtió que no se puede decir "el que no está de acuerdo puede simplemente no hacer uso de ella", porque como se sabe, "poco a poco también la ley va moldeando las mentalidades".
"Si a lo que ustedes deben legislar ahora agregan mañana que se llame en los hechos ‘matrimonio’ a algo que por naturaleza humana nunca lo será, se seguirá desarrollando una mentalidad en que todo da lo mismo. Mentalidad de derechos que, sin sus correlativos deberes, ya está comenzando a provocar dolorosas consecuencias de violencia e irresponsabilidad en la vida familiar y social", advirtió.
En ese sentido, recordó que los cristianos son conscientes de que una sociedad que excluye a Dios "se autodestruye" y que es deber de la Iglesia opinar sobre las realidades políticas desde el punto de vista moral.
"Estamos dispuestos a respetar las opiniones de todos y, por supuesto, también las leyes justas de las autoridades legítimas. Pero no nos excluiremos de participar en el diálogo democrático, ni viviremos bajo la presión de visiones laicistas de la sociedad. Tampoco aceptaremos los intentos de ubicarnos como una categoría de ciudadanos relegados a nuestros templos o a nuestras propias instituciones", indicó.
Finalmente, Mons. Goic destacó la importancia del Senado como "espacio privilegiado para buscar caminos de encuentro sereno" y de consenso; una "urgente tarea hoy en la antesala del Bicentenario".