El Arzobispo de Londrina y Presidente de la Comisión para la Vida y la Familia de la Conferencia de Obispos Católicos de Brasil, Mons. Orlando Brandes, señaló que "cuando una familia transmite los principios religiosos, el Evangelio a los propios hijos, está cumpliendo su misión de Iglesia doméstica".
Así lo indicó el Prelado en la presentación de la edición 2009 del libro "El tiempo de la familia" en el marco de la Semana de la Familia que se celebra desde 1992 y que este años se realizará en el mes de agosto.
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El lema de este año es "Familia, Iglesia, casa y camino para el discipulado" con el que se quiere promover la catequesis, ya que, explica el Prelado, "los padres son los primeros catequistas".
"En el corazón de la familia fundada sobre el matrimonio está su vocación de ser fuente natural de la vida, primera escuela de humanidad, en donde las diversas generaciones aprenden y ejercitan cada día el gusto y la virtud en el vivir, no solo por separado sino juntos, en el signo de las diversas formas del amor: don, perdón, sacrificio, paciencia y cotidianidad, alegría y dolor", dijo.
Ante las distintas amenazas que se ciernen sobre la familia, advierte el Arzobispo, es necesario ayudar a que ésta para que no pierda "de vista su misión fundamental: ser la primera escuela de virtudes humanas y sociales que constituyen lo esencial de la convivencia".