Mons. José Luis Chávez Botello y Oscar Campos Contreras, Arzobispo de Antequera-Oaxaca y su Obispo Auxiliar, respectivamente, emitieron un comunicado en el que resaltaron la necesidad de fortalecer los valores espirituales en la etapa de la juventud.
En el texto titulado "La juventud, un tesoro que puede perderse", los prelados precisaron que en esta etapa de la vida "pueden madurar opciones decisivas para el resto de la vida. Todos hemos vivido esa experiencia y sabemos en que medida define el futuro para bien o para mal".
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Por ello, indicaron, "se trata, por un lado de tomar conciencia de la gran importancia que tiene la población juvenil para construir la sociedad del futuro, y por otro de animar a la juventud a asumir las responsabilidades con una mejor comprensión del bien y de la verdad".
Ante los muchos desafíos que enfrentan los jóvenes en la sociedad actual, a distintos niveles, prosiguen los obispos, la reciente Jornada Mundial de la Juventud "nos cuestiona a todos: autoridades, dirigentes sociales, maestros, empresarios, sacerdotes, padres de familia, para ver si, en verdad estamos haciendo lo que nos toca como adultos responsables, para que los jóvenes de hoy puedan ser los pilares firmes de una sociedad más humana".
Una sociedad, precisaron, "en donde el respeto a la vida y a la dignidad de las personas permitan una convivencia armónica y ofrezca iguales oportunidades de desarrollo a todos sus miembros".
Este importante evento, concluyeron los prelados, es "una invitación a toda la juventud para que descubra este momento de su vida como una oportunidad de fortalecer, ya desde el presente, los olvidados valores espirituales que les darán integridad personal y en consecuencia una felicidad auténtica".