El Arzobispo de Caracas, Cardenal Jorge Urosa Savino, advirtió que uno de los problemas de los católicos venezolanos es "la fragilidad y la inconstancia" de la vida cristiana y la fe, por ello los alentó a renovarla y fortalecerla durante "la celebración de los oficios de la Semana Santa".
Durante la homilía de Domingo de Ramos, el Purpurado señaló que es triste ver a fieles que se desviaron hacia otras religiones y supersticiones como la Nueva Era o la Santería, "que es una religión absolutamente pagana, en dioses de barro y de ilusión, que no tienen poder para salvar ni para dar la felicidad".
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El Arzobispo recordó que en el bautismo el católico recibió el don de la fe, con la cual se convierte en discípulo de Cristo y lo reconoce como su Salvador. Jesús, afirmó, "nos llama a mantener firme la fe que profesamos" y a estar "junto a El en todas las circunstancias de nuestra vida", siendo fieles y consecuentes.
"En particular quiero invitarlos a seguir a Jesucristo con nuestro amor a la vida y el rechazo a la muerte, al odio, a la violencia y a la delincuencia", afirmó el Cardenal Urosa.
En ese sentido, rechazó "esa violencia criminal que esta derramando tanta sangre y provocando tanto dolor entre nosotros, especialmente en los sectores populares". El Arzobispo indicó que "la violencia y el hampa creciente, los secuestros, el sicariato, el narcotráfico, el atropello a los derechos humanos", ofenden los mandamientos de Dios.