El Arzobispo de Madrid, Cardenal Antonio María Rouco Varela, pidió a la Virgen de la Almudena interceder por las personas que sufren las consecuencias de la crisis económica mundial, que se desató por la "crisis de conciencia moral y espiritual".
Durante la Misa por la festividad de esta advocación mariana, el Purpurado señaló que la "maternidad de la Virgen" se necesita con nueva urgencia, pues la capital española "también sufre las consecuencias de la crisis de la economía", como son el aumento del desempleo y las dificultades "de muchas familias para hacer frente a los gastos".
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El Cardenal de Madrid llamó a los fieles y a las personas de buena voluntad a dar una "respuesta de amor fraterno, realista y comprometido" para apoyar a quienes necesitan ayuda.
En su homilía, el Arzobispo también denunció el mal de la soledad, que aunque es una situación propia de la condición humana de todos los tiempos, paradójicamente se vive en un mundo cada vez más interconectado.
"Los hombres de hoy conocemos demasiado bien el mal y la desdicha de la soledad, son muchas las personas de nuestro entorno que viven solos, que mueren en soledad física y, lo que duele más, en soledad espiritual en una sociedad donde el individualismo egoísta triunfa", señaló
En ese sentido, el Cardenal Rouco calificó a la soledad como uno de los mayores males de nuestro tiempo. Indicó que este mal lo sufren especialmente los inmigrantes, los hijos de padres separados, los enfermos, los ancianos y "las madres que quieren conservar las vidas de sus hijos no nacidos y luchan por ellos".