El Arzobispo de Caracas, Cardenal Jorge Urosa Savino, destacó el amor que el fallecido Cardenal Rosalío Castillo Lara tuvo por Venezuela, y alentó a los fieles a seguir su ejemplo para ser "decididos y firmes en la construcción de una Patria grande, libre y fraterna, por los senderos de la justicia y de la paz".
"Sus últimos años transcurrieron en medio de grandes luchas por la justicia y la paz en Venezuela, que le acarrearon dificultades y ataques de toda índole, debido a la intolerancia de quienes no consienten disidencia alguna", recordó el Arzobispo de Caracas durante la Misa por el primer aniversario de la muerte del Cardenal Castillo Lara.
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Añadió que a pesar de los ataques, el Purpurado "mantuvo siempre una posición indeclinable y valiente, de adalid de la verdad, y de la justicia, en defensa de la libertad y el bien común de todos los venezolanos. Su larga y fructuosa existencia estuvo colmada de éxitos el servicio de Dios, de la Iglesia y de Venezuela".
El Arzobispo señaló que su lema episcopal "Misericordia et veritas" (misericordia y verdad), muestra "su empeño por la bondad y su servicio indeclinable a la verdad, en medio de las dificultades y a pesar de las contradicciones".
En ese sentido, recordó las obras de caridad que realizó a su regreso a Venezuela en 1997, "con fondos de su propio peculio y con ayuda de muchos amigos", en la tierra de sus abuelos, en Guiripa.
Finalmente, el Cardenal Urosa llamó a orar para que el Señor "nos conceda muchas y santas vocaciones, hombres y mujeres que, como el Cardenal Castillo Lara quieran seguir a Jesucristo en el sacerdocio o la vida consagrada".