La Conferencia Episcopal Venezolana (CEV) recordó que el deber de los fieles es "ayudar económicamente a la Iglesia en sus necesidades" y el de los Pastores "disponer que sean correctamente administrados", para así formar una verdadera comunidad católica "partícipe de los gozos, penas y necesidades de las otras comunidades".
"Desde su inicio la Iglesia recibió el mandato de continuar la Misión evangelizadora del Señor Jesús", dirigido tanto a los obispos, sacerdotes y personas consagradas, como los laicos; y parte de ello es tomar conciencia de "la necesidad de vivir en comunión de bienes", factor "indispensable para entender la vida de la Iglesia", indican los Prelados en una reciente Exhortación Pastoral sobre el Sostenimiento de la Obra Evangelizadora de la Iglesia en Venezuela.
Recibe las principales noticias de ACI Prensa por WhatsApp y Telegram
Cada vez es más difícil ver noticias católicas en las redes sociales. Suscríbete a nuestros canales gratuitos hoy:
Asimismo, señalan que para "facilitar esta integración de los cristianos, en la obra evangelizadora de la Iglesia, los Obispos venezolanos hemos estructurado el Plan Iglesia Solidaria" que busca que "cada fiel venezolano se sienta parte integrante de la misma y corresponsable de su buena marcha en todos los sentidos".
"Conscientes de que nuestra Iglesia vive situaciones difíciles, particularmente en lo que se refiere al ámbito económico y social, nos hace sentir la urgencia de proponer al Pueblo de Dios, una doctrina y práctica de la Solidaridad con los bienes que tenemos, según el designio de Dios Creador del mundo", sostienen en el documento.
Tras afirmar que "la solidaridad concreta entre los que tienen más, hacia los que tienen menos, será el signo más concreto de nuestro amor fraterno", la CEV destaca que "el principal aporte económico a nuestra Iglesia proviene de los mismos fieles desde sus comunidades", así como de las "colaboraciones de Iglesias hermanas, de otros países, para atender parte de proyectos específicos, en el marco eclesial de la comunión de bienes".
En otra parte del escrito, los Prelados recuerdan que todos los miembros, organismos e instancias de la Iglesia, deben contribuir "desde su posibilidad y especificidad, a promover una catequesis referente a la comunicación cristiana de bienes y la responsabilidad de los bautizados en el sostenimiento económico de la acción evangelizadora".
Además, manifiestan la necesidad de "que los creyentes conozcan el origen de los fondos económicos que utiliza la Iglesia", así como de la correcta información sobre su destino.
"Al deber de los fieles de ayudar económicamente a la Iglesia en sus necesidades, corresponde también el deber correlativo de los Pastores, de disponer que sean correctamente administrados", aseguran en el documento.
La exhortación concluye con la invitación de la CEV "a poner en práctica este Plan Iglesia Solidaria en todas las circunscripciones eclesiásticas de nuestro país".