El Arzobispo de Lima, Cardenal Juan Luis Cipriani Thorne, resaltó la necesidad del diálogo para que en medio de la cultura milenaria, la Iglesia pueda tener "un espacio en el cual todos esos hermanos nuestros de la China se expresan libremente con Dios".
En la Misa dominical ofrecida por las víctimas del terremoto que dejó más de 70 mil muertos en el país asiático, el Purpurado señaló que este esfuerzo por el diálogo se evidencia en el hecho de que existe una "Vicaría para atender de manera especial a la población china que reside aquí", la que "reconociendo la cultura, el idioma, la música, la liturgia, permanentemente acompaña a estos hermanos nuestros en esa parte tan importante de su vida, la dimensión religiosa".
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"Creo que el mundo hoy pide a quienes tenemos responsabilidades saber mirar más profundamente, para saber separar lo accidental de lo esencial", y en ese sentido la Iglesia "con enorme respeto mira a esa cultura milenaria de la China" y "en ese diálogo lento va volviéndose a recuperar la confianza" y la Iglesia vuelve a tener los espacios para que pueda expresarse libremente, agregó.
Asimismo, el Cardenal Cipriani se refirió a la globalización imperante en el mundo actual y aseguró que "tiene fundamento en que hay una sola raza humana" en la que no hay diferencias "en la dignidad de la persona humana" y por eso "todo sistema por muy diferente que sea, va acercándose a esa común definición y aceptación de lo que es la libertad del ser humano, la dimensión religiosa, y frente a esa base cultural común, van surgiendo muchos aportes para beneficio de los pueblos".
Tras invitar a los feligreses a rezar por las personas fallecidas por el terremoto de China, y por sus familiares, afirmó que "el desafío de la globalización tiene como punto central la globalización de la solidaridad, y qué mayor expresión de solidaridad que rezar a Dios por las almas" de "tantos cientos y miles de hermanos nuestros que han pasado de esta vida a la otra" y de familias que "han experimentado el dolor de la destrucción".
En otro momento el Arzobispo de Lima recordó saludó a los padres en su día y les recordó que vale la pena que "profundicen más en la responsabilidad tan grande que tienen en la formación de los hijos", y exhortó a participar más en el proyecto educativo pues "exige que ese núcleo vital, pequeño que es la familia esté cuidando aquellas dimensiones tan importantes que dejan una huella en la vida de las personas".
La Eucaristía fue concelebrada por el Vicario de la Comunidad China y Obispo Auxiliar de Lima, Mons. Adriano Tomasi, y asistieron el Presidente del Perú, Alan García Pérez; el Embajador de China en el Perú, Gao Zhengyue, entre otras autoridades. Además participaron cientos de residentes de la colonia China en el Perú.