El Arzobispo de Lima, Cardenal Juan Luis Cipriani Thorne, pidió a los feligreses a difundir la devoción a la Divina Misericordia "por todos los hogares, especialmente a la juventud, a través de los colegios, universidades, institutos y todos los rincones de Lima" pues es la mejor manera de ser fieles al Señor.
El Purpurado indicó que "como Pastor de la Arquidiócesis de Lima los llevo de la mano para que esta maravillosa devoción sea un camino privilegiado de acercar a muchas almas alejadas al encuentro con Cristo misericordioso, sufriente y resucitado".
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En su homilía por el día de la Divina Misericordia, el Cardenal Cipriani recordó que la difusión de devoción "es una maravillosa manera de ser fieles a lo que Cristo quiere, a lo que hoy la Iglesia nos enseña y a lo que hizo el recordado Papa Juan Pablo II, quien falleció justamente en la vigilia de la celebración" de esta fiesta "en cuya difusión de su devoción este recordado pontífice colaboró activamente".
"Ahí está el voluntariado del Señor de la Divina Misericordia: conocer bien esta experiencia de amistad con Cristo y con María; y ser voluntarios para dedicar horas visitando los hogares, explicando esta devociones, promoviendo la distribución de estas imágenes para que Él toque los corazones".
Asimismo, en su programa radial Diálogo de Fe, el Arzobispo de Lima explicó que "en misericordia hay dos palabras en latín; ‘miser’, de miseria; y ‘cordia’, de corazón" es decir "la miseria en el corazón hace que la persona se identifique contigo".
Es decir "si tengo la miseria de una enfermedad, la persona que tiene misericordia, en su corazón pone el dolor, la dificultad del enfermo y entonces me mira, me acompaña y me ayuda con el mismo sentimiento que tiene el propio enfermo".
"Los animo a que vivan en la confianza de la Misericordia de Dios que siempre nos busca", señaló.