El movimiento pro-vida británico saludó las declaraciones del líder del Partido conservador británico, David Cameron, quien ha apoyado la reducción a 20 semanas –contra las 24 actuales- como límite para la práctica de un aborto legal.
El anuncio se hizo en la antesala de la discusión parlamentaria sobre la ley sobre la fertilización in vitro y experimentación con células embrionarias, que será presentado en la Cámara de los Comunes después de su aprobación en la de los Lores.
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Los movimientos pro-vida han propuesto enmiendas sobre la medida para reducir el límite del aborto legal. "En Gran Bretaña, mientras se aborto a un niño en un hospital, en otro un bebé es salvado tras un parto prematuro. Es ridículo. Hay un gran consenso público sobre la posibilidad de reducir el límite del aborto legal", declaró Julia Millington, vocera de Alianza Pro-vida, a la agencia italiana SIR.
"Nosotros queremos más que una reducción del límite legal, queremos que el aborto sea completamente abolido", explicó Greg Clovis, director de Vida Humana Internacional en Reino Unido.
"Se ha informado que los médicos quisieron abortar a un bebé de 38 semanas de gestación porque tenía una presunta malformación, pero nació en excelente estado de salud. Lamentablemente, la cultura pro-aborto está pervirtiendo la profesión médica", indicó.