Este viernes, un grupo de laicos argentinos ha convocado a las 18:30 horas un acto de reparación en la Catedral de Buenos Aires por la reciente profanación del templo protagonizada por las Madres de Plaza de Mayo y un grupo de vándalos.
Los organizadores del acto han anunciado que rezarán el Santo Rosario "sin odios, sin pancartas, sin gritos estridentes, en un clima de silencio y oración profunda para que Dios perdone nuestras ofensas como nosotros perdonamos a quienes nos ofenden".
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"Si las puertas de la Catedral están cerradas, rezaremos el Santo Rosario en el atrio, recordando que igualmente Dios estará allí presente oyéndonos, con el corazón de Padre.
Si están abiertas las puertas nos ubicaremos frente al Santísimo, que está al fondo del lado derecho de la nave lateral derecha", explicaron los organizadores en un mensaje llegado a esta redacción.
Asimismo, piden a los participantes no responder ante la posibilidad de que aparezcan grupos provocadores, "ya que hacerlo es caer en sus planes de enturbiar el acto de piedad con odio que no conduce a nada bueno", agregaron.
El 29 de enero pasado, un grupo de seis Madres de Plaza de Mayo, encabezado por su presidenta Hebe de Bonafini, tomaron la Catedral Metropolitana para ayunar en protesta por la falta de entrega de fondos estatales destinados a sus proyectos de viviendas populares en la capital argentina.
Bonafini declaró a la prensa que como los servicios higiénicos de la catedral estaban cerrados, "tuvimos que improvisar uno, detrás del altar".
La activista es conocida por su anticatolicismo. En una ocasión le deseó la muerte al Papa Juan Pablo II y tras su fallecimiento aseguró que el Pontífice iría "al infierno". Asimismo festejó los atentados del 11 de septiembre de 2001 en Estados Unidos.