La Oficina de Pastoral del Migrante (OPM) de la Arquidiócesis de Turín (Italia) lanzó la campaña "Yo tengo un amigo, sacerdote caldeo iraquí", para ayudar a presbíteros de Irak en sus necesidades, tanto materiales como espirituales, ante las dificultades que se vive en el país donde los católicos son la minoría.
El proyecto, que se realiza por quinto año consecutivo, busca "sostener económicamente diez jóvenes sacerdotes de Bagdad", indicaron los responsables de la campaña, P. Fredo Olivero, Director de la OPM, y el P. Douglas Dawood.
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Asimismo señalaron se busca dar "no solo un apoyo económico" a los sacerdotes en Irak, "sino también un importante apoyo moral", frente al testimonio que muestra que su "empeño va más allá de la emergencia".
Los "recientes atentados que han tenido como objetivo muchos lugares de culto cristianos" (cuatro en Bagdad, tres en Mosul, y dos en Kirkuk) son "testimonios de como los cristianos iraquíes"; que "en su calidad de minoría, viven cada muerte como un enésimo tentativo de erradicarla de la tierra de Abraham, donde ha tenido su origen"; es "muy difícil y llena de peligros", indicaron en una nota de prensa.
Por ello "necesitamos de tu ayuda" para "continuar dando una ayuda, una esperanza" a los "nuevos amigos", aseveraron los responsables.
Para más información escribir a: f.olivero@diocesi.torino.it